Es aburridísimo tener que escribir a cada rato sobre López Obrador. Pero hace tantas ilegalidades y dice tantas sandeces, que es imposible no hacerlo; solo son comparables a la enorme cantidad de baches en calles y carreteras de las alcaldías gobernadas por su partido.
Las hay para burlarse y reír o para deprimirse y llorar así que, si no se agota y termina de leerlo, elija la que más le choque de este apretado resumen de los últimos días.
A las críticas por no haber advertido del ciclón que destruiría Acapulco, respondió «pensé mandar un mensaje que dijera OTIS viene cañón, pero lo pensé mejor y no lo hice», mostrando que contrario a todos, cuando repiensa actúa peor.
Y dio como disculpa para no ir a apoyar a los damnificados, «si voy no faltarán provocadores que me mienten la madre y yo cuido la investidura presidencial».
Pero ha reiterado que le encanta visitar Badiraguato la tierra sinaloense de narcotraficantes donde mandan los hijos del Chapo Guzmán, «porque es territorio de gente de bien y trabajadora.»
Sigue con la necedad del Tren Maya, cuya construcción que dijo costaría ciento veinte mil millones de pesos, va en quinientos mil.
La destrucción de ese maravilloso entorno natural benefició a su exchofer Nicolás Molinero, quien según el Portal Latinus se convirtió en dueño de 645.000 metros cuadrados ubicados justo en una estación y frente al nuevo aeropuerto de Tulum.
Y es que cuando se trata de parientes y amigos no le importan «la ética y la ley», como escribió el editorialista de El Universal José Antonio Crespo, en su artículo de la semana pasada, porque disculpa a cualquier ladrón o traidor que decide apoyarlo con votos, influencias, o dinero.
«Al momento que se pasan con nosotros, se limpian y debe perdonárselos todo», ha dicho.
Para festejar el 20 de noviembre, aniversario la Revolución Mexicana, decretó que las empresas ferrocarrileras de carga «deben privilegiar la movilidad de pasajeros».
Y las amenazó con que si antes del próximo 24 de enero, no presentan propuestas viables para siete rutas iniciales les retirará concesiones sobre 17.500 kilómetros de vías férreas, para darlas a otros particulares o a los militares.
Sigue el desabasto de medicamentos y cambió por cuarta ocasión en su sexenio a la encargada de las compras consolidadas de la Secretaría de Salud; sin llamar a cuentas a las anteriores.
Y quiere poner en el estado de Hidalgo «una farmacia enorme, que contenga todos los medicamentos que hay en el mundo».
Otro de sus corruptos fracasos, es la vacuna Patria; que a casi cuatro años del Covid y un despilfarro de mil millones de pesos, no está lista ni servirá para las nuevas variantes.
No olvida su pleito con España, por no habernos pedido perdón «por los crímenes de la conquista».
Su furia lo llevó a quitar del Paseo de la Reforma, el monumento a Cristóbal Colón y cambiar nombre a recintos y calles que llevaban el de conquistadores españoles.
Y va a cambiar otro, «¡qué Mar de Cortés ni que nada! se llamará Golfo de California».
La jerarquía católica y la cúpula empresarial coinciden en que su estrategia de seguridad ha provocado que su gobierno sea el más violento de la historia.
Se mata en México en promedio, a diez mujeres al día y se viola a sesenta personas a la semana; en su mayoría mujeres y la mitad niñas.
La primera semana de este noviembre hubo 682 asesinatos y al estar escribiendo este artículo, me llegó el dato de ocho personas balaceadas en Cuernavaca.
Tampoco andamos bajos en las cifras de secuestros y desaparecidos, pero AMLO asegura que México está en total paz «porque tiene al Ejército como Ángel de la Guarda».
Por presión del presidente Biden, debió ir a San Francisco para la Cumbre de la APEC, pero como solo habla español y eso a medias y lento, tuvo que usar un aparatito traductor que no se quitó de la oreja.
Y lástima, Margarito; porque al no poder decir nada bueno de él, Biden tuvo que recurrir a uno de esos típicos chistes gringos: «Estuviste tan cautivador con mi esposa Jill, que me preocupé le cayeras mejor que yo» le dijo en el brindis de una cena.
Seguramente en la oficina de prensa mexicana alguien percibió la burla de Biden, o temió los celos de su esposa Beatriz Gutiérrez, poder tras la silla presidencial, porque en el comunicado oficial se omitió esa parte.
Y por cierto, que ella tampoco canta mal las rancheras; porque sin méritos que la avalen, recién fue ascendida al nivel dos del Sistema Nacional de Investigadores.
No acabo de entender el empeño de pedir perdón por la historia sin la cual el señor presidente no existiría.
Sra. Gurza, lamento decirle que a pesar de su odio irracional y sus intentos por desprestigiar este bendito gobierno encabezado por el sr. Presidente Andrés Manuel López Obrador, está perdiendo el tiempo.
El sr. Presidente tiene una aceptación del 79% 😆😆😆😆😆