La empresa estadounidense Chevron y el equipo operador Transocean (con sede en Suiza) firmaron este sábado un acuerdo con la fiscalía brasileña, para resolver las demandas motivadas por un derrame de petróleo frente a la costa de Río de Janeiro (al sureste del país), informa Andes/teleSUR.
Chevron acordó pagar 41,6 millones de dólares en concepto de indemnización por el derrame de tres mil barriles de crudo vertidos en noviembre de 2011.
La oficina del fiscal de Río de Janeiro indicó que el acuerdo prevé además para Chevron obligaciones inéditas de precaución y prevención de nuevos incidentes y medidas compensatorias por los derrames.
El convenio contó con el consentimiento de la Agencia Nacional de Petróleo (ANP, estatal) y el Instituto Brasileño del Medio Ambiente (Ibama). Según dijeron las autoridades, aún debe ser homologado por una corte federal.
En noviembre de 2011, unos tres mil barriles de crudo se derramaron en aguas profundas del Atlántico en el campo de Frade, a 370 km al noroeste de la costa de Río de Janeiro.
Chevron sólo actuaba en Brasil en el campo de Frade -junto a la suiza Transocean, que operaba las plataformas-, con una de unos 60 mil barriles diarios.
En marzo de 2012, una nueva fuga más pequeña, fue detectada en la misma área, situada en la cuenca de Campos. Ante esto, Chevron se vio obligada a suspender sus operaciones en el lugar.
En abril pasado, Chevron fue autorizada a reanudar parcialmente su producción de petróleo en Brasil. Seis meses antes, la empresa ya había sido multada por unos 35 millones de reales (unos 15 millones de dólares) por el primer derrame.
El Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales (Ibama) también impuso en 2011 dos multas a Chevron por un valor total de 33,4 millones de dólares por daños ambientales y fallas en el plan de emergencia aplicado durante el accidente.