A inicios del pasado mes de noviembre falleció Salvador Juanpere Aguiló, a los 74 años, quien promovió la creación del Museo Nacional de Escacs, luego reconvertido en Centro de Historia del Ajedrez, en Castellar del Vallès (Barcelona).
De hecho, ha sido el único Museo que ha existido sobre ajedrez en España, ante la falta de concreción de otros proyectos.
Juanpere presidió el Club d’Escacs Castellar del Vallès (localidad de más de 25.000 habitantes) durante más de veinte años, de 1976 a 1996, donde formó a decenas de generaciones de jugadores.
Así, siempre estuvo estrechamente ligado al mundo del ajedrez en varias de sus vertientes y en especial, al estudio de la apertura catalana (1.d4 Cf6 2.c4 e6 3.g3).
El Museo, actual Centro de Historia, estaba dedicado especialmente a la figura de su creador en 1929, Saivilly Tartakower (1887-1956). Contaba con 80 libros sobre el ajedrecista polaco-francés, incluyendo todos sus libros de ajedrez y de poesía.
Juanpere estaba escribiendo su biografía que esperaba terminar y que ya alcanzaba las 400 páginas.
Previamente, en 1989, escribió junto con los hermanos Xavier y Enric Mateu i Palau: ‘Obertura Catalana 1929-1989’, el primer libro en catalán de la apertura ajedrecística con motivo del cincuenta aniversario de su creación.
Tras muchas dificultades, especialmente financieras, en 2021 inició una campaña para crear el Museo Nacional del Ajedrez (hizo un crowdfunding que apenas recaudó 150 euros sobre los 8.000 necesarios), un proyecto único en el país, pero finalmente, y debido a las exigencias legales y falta de apoyo institucional, devino en Centro de Historia del Ajedrez para la investigación, difusión y preservación del patrimonio ajedrecístico.
El museo conserva un extenso archivo documental, más de cien tableros, muchos de ellos donados procedentes de los cinco continentes y organizaba charlas y conferencias.
Asimismo alberga medio centenar de libros de historia y ejemplares antiguos del ajedrez, tanto en catalán y castellano, destacando una obra editada en 1900, Libre de les costumes dels homens e dels oficis dels nobles sobre lo joc dels Escachs (Libro de las costumbres de los hombres y de los oficios de los nobles sobre el juego del ajedrez) de Jacobo de Cessolis (1250-1322).
El Museo, hoy Centro de Historia, editó tres libritos. Los juegos de las campañas, para adquirir juegos, Faci la primera jugada (Haga la primera jugada) y Patrocina un Joc pel Museu (Patrocina un juego para el Museo).
Del mismo modo, poseía el legado del maestro Benito López Esnaola (1918-1997). Autor de quince libros de ajedrez, destacando ‘Ajedrez a la ciega’, y experto en los 64 escaques el material fue donado en 2021 al Museo con más de tres mil unidades entre libros y revistas.
En sus investigaciones Juanpere destacó la conexión entre el juego y la historia de Cataluña.
De este modo, en 1997, con reedición en 2010, escribió ‘Arnau Mir de Tost y el juego de ajedrez de la colegiata de Sant Pere d’Àger’, una novela histórica de investigación, en la que trabajó tres años, y que explica cómo las piezas árabes de cristal de roca del califato fatimí (909-1171), que alberga la colegiata del monasterio de la localidad leridana de Ager, (declarado Bien de Interés Cultural) propiciaron las primeras partidas jugadas en Cataluña entre los siglos X y XI.
Nacido en 1951 en El Masroig, trabajó profesionalmente como técnico informático y dedicó su tiempo libre a diversas entidades locales, especialmente a los deportes. Fue seguidor barcelonista y concejal en Castellar del Vallès de 1983-87.
La Federación Catalana de Ajedrez (FCE) tuvo un recuerdo para su persona. Se desconoce si se continuará su legado ajedrecístico.
