Los equipos negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el Gobierno de Colombia anunciaron este viernes que alcanzaron un acuerdo en el tercer punto de la agenda sobre el narcotráfico y cultivos ilícitos.
De esta forma, las partes que desarrollan el diálogo en La Habana, capital de Cuba, acordaron los puntos de tierras, participación en política y ahora, en narcotráfico y cultivos ilícitos, informa Andes/telesur.
Las FARC resaltaron que con este nuevo acuerdo se continúa en el esfuerzo de alcanzar la paz para Colombia: «Es necesario encontrar una solución definitiva sobre drogas ilícitas, cultivos, comercialización y producción», resaltó Rodolfo Benítez, garante cubano, quien dio a conocer el comunicado respectivo.
Destacó que «hemos logrado acuerdos que incluyen la participación de las comunidades en el diseño y ejecución de los programas (…) que ofrecerán una solución al fenómeno», sin embargo, detalló que consideran que «el conflicto interno de Colombia es de una larga historia que tiene varias décadas y causas ajenas al cultivo ilícito de drogas».
Durante su alocución, Benítez sostuvo que este acuerdo busca «contribuir con el propósito de paz estable y duradera» por lo que consideró que es necesario, a la par, «encontrar una solución definitiva incluyendo los cultivos ilícitos, la distribución y la comercialización de drogas ilícitas» que han tenido «graves efectos sobre el goce de ejercicios y derechos de la sociedad colombiana».
En ese orden, explicó que es necesario crear una «nueva visión» frente a este problema que implica buscar nuevas alternativas en los territorios afectados por los cultivos ilícitos.
«Aspiramos a una paz. Somos conscientes de que este propósito depende también de consensos, en particular, por aquellos que de manera directa o indirecta han sido afectados por este problema». En ese sentido, el vocero instó en que «deben asegurar una acción coordinada con la cooperación internacional».
Explicó que en Colombia se «pondrá en marcha un nuevo programa integral» como parte de la «transformación institucional del campo y para generar condiciones de bienestar para aquellos que viven afectados por los cultivos ilícitos».
También hizo referencia a que las partes acordaron que las «propuestas de las asambleas comunitarias serán base de los planes» para atacar este problema y que aquellos que incumplan «los compromisos adquiridos, a pesar de los esfuerzos, el gobierno procederá a su erradicación manual donde sea posible».
Horas antes de concretarse el anuncio, la cuenta en la red social Twitter @FARC_EPAZ, que ofrece actualización de los ciclos de diálogo entre las partes, adelantó que se daría a conocer este viernes la información en detalle.
Luego de concretarse este acuerdo, los equipos negociadores prevén discutir el tema de justicia transicional y víctimas del conflicto armado. En este punto, las FARC han insistido en que se debe convocar una comisión de la verdad, integrada por expertos nacionales e internacionales.
Este viernes, las FARC y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) también anunciaron el cese al fuego durante el periodo electoral, desde el 20 de mayo hasta el 28 de mayo.
Las delegaciones del grupo insurgente y del gobierno colombiano iniciaron el proceso de conversaciones el pasado 18 de octubre de 2012, en la ciudad de Hurdal, en las afueras de Oslo (capital). En ese encuentro, los representantes de ambas partes establecieron una agenda de cinco puntos para debatir: el desarrollo agrario, participación política, fin del conflicto y desmovilización, solución al problema de las drogas ilícitas y reparación a las víctimas.
Posteriormente, a estas temáticas se agregó un sexto punto concerniente a la verificación y refrendación de los acuerdos finales. Luego de que se asentaran las bases del proceso de paz en Noruega, los diálogos entre las partes se trasladaron a la ciudad de La Habana.
El primer punto en el que las partes lograron llegar a un acuerdo fue el correspondiente al tema agrario, causa del conflicto que condujo en 1964 a la creación las FARC, el mayor grupo insurgente de esa nación. Posteriormente, se concretó el acuerdo sobre la participación del grupo en la vida política del país suramericano.
El conflicto armado en Colombia ha dejado casi cuatro millones de desplazados y 600 mil muertos en aproximadamente 50 años, en cuyo proceso también han participado grupos de insurgentes, paramilitares de derecha y organizaciones relacionadas con el narcotráfico.