Un vino espumoso, el cava Gloria Ferrer Blanc de Noirs Carneros de las bodegas de la familia catalana Ferrer en California es el segundo en el ránking 2013 de los mejores vinos del mundo que acaba de hacer público la Asociación Mundial de Periodistas y Escritores de Vinos y Licores, WAWWJ en sus siglas en inglés (World Association of Wine and Spirits Writers and Journalists) que preside el ingeniero químico y periodista argentino especializado en vinos Raúl Castellani.
La bodega Gloria Ferrer es un claro ejemplo del espectacular desarrollo de la historia del vino en Estados Unidos. El viticultor catalán Pedro Ferrer siempre había soñado con tener una bodega en América y empezó a buscar a principios de los años treinta del siglo pasado, pero la Guerra Civil española aplazó su sueño. Años más tarde, su hijo Josep Ferrer pudo hacerlo realidad al establecerse en California, donde después de muchos estudios y pruebas, en 1982 se decidió por una zona, la región de Carneros en el Valle de Sonoma, donde el clima tiene un sabor mediterráneo, algo así como un solar catalán mirando al Pacífico.
Allí plantó viñas de las dos variedades características de las uvas champagne, chardonnay y pinot noir, al tiempo que empezó a construir la bodega. Acabada en 1986, le puso el nombre de su esposa, Gloria Ferrer. En la web corporativa se ensalza la importancia de las mujeres en la familia Ferrer. Dolores, la madre de Josep Ferrer, fue quien sacó adelante la bodega en España tras la muerte de su marido en la Guerra Civil.
A falta de catarlo, del champán californiano Gloria Ferrer Blanc de Noirs –como suena: blanco de tintas (90% Pinot Noir, 10% Chardonnay)– procede resaltar de entrada su precio sorprendentemente asequible –unos ocho dólares en el mercado estadounidenses y entre 12 y 15 euros en Europa– para tratarse de un sparkling wine. que el año pasado consiguió once medallas doro en concursos de vinos en Estados Unidos y este año, además de llega al segundo puesto en la lista de los 100 Mejores Vinos de la WAWWJ después de haber obtenido otras dos medallas de oro, una de ellas la de la San Francisco Chronicle Wine Competition.
«Divertido y festivo, con aromas florales de frambuesa y galleta graham que conducen a sabores frescos y suculentos de limón y fresa. Un valor seguro en California burbujeante.» Esto dijo de este vino Wine Spectator el pasado mes de octubre.
Argentina copa el ‘top 100’ de la WAWWJ