Las niñas africanas siguen en riesgo de sufrir una ablación genital porque aunque las leyes prohiben la mutilación genital femenina en casi todos los países, los gobiernos no están aplicando las leyes conforme era de esperar.
Se calcula que cerca de 16 millones de niñas de países como Somalia, Sudán, Sierra Leona, Chad, Liberia y Mali, saben que esto sucederá dado que ni siquiera se ha criminalizado la ablación tal y como se recoge en el documento sobre las leyes de los 28 países en los que se practica la ablación. Lo verderamente cierto, es que los países al no aplicar la ley, fracasan a la hora de evitar la mutilación que siempre es traumática y supone un impacto para toda la vida.
Actualmente, 55 millones de niñas menores de 15 años en África han sido sometidas a la ablación o están en riesgo de serlo. La mitad, viven en Egipto, Etiopía y Nigeria que ya tienen dispuesta la prohibición. Solamente Kenia y Uganda tienen una legislación que es dura frente a esta práctica con consecuencias extremas.
La aplicación de la ley no solo es infrecuente sino que no se ha realizado de forma generalizada con lo cual, al no ser suficientemente duras las leyes, sigue la práctica que es del todo inaceptable para la mujer. En el grupo 28 Too Many, han recopilado información 125 abogados de todo el mundo para que los países que fracasen a la hora de proteger a sus mujeres y niñas deban ser sancionados.
La otra realidad es que muchos padres llevan a sus hijas a otros países a que sea practicada la ablación medicalizada y se sometan a operaciones fuera de sus países de origen. Niñas que finalmente serán marginadas en sus respectivas comunidades y que padecen para siempre el estigma de haberlo sufrido.