El ministerio de Sanidad ha confirmado a través de su ministra en funciones, María Luisa Carcedo, que será financiado por la Seguridad Social el tratamiento contra la adicción al tabaco en las próximas semanas a los pacientes que lo soliciten.
Cada año mueren 50.000 personas en España víctimas del tabaquismo y actualmente ya es fumadora el 25 % de la población por lo cual, el coste de los pacientes y las enfermedades crónicas producidas solamente por el tabaco van en aumento considerablemente.
Poner en marcha este proyecto supondrá un beneficio para cerca de 70.000 personas que hoy son adictas al tabaco, adictos que no han conseguido hasta la fecha dejarlo por otras vías. Los fármacos que se dispensarán para ayudar a dejar de fumar serán la Vareniclina (conocido por Champix en su forma comercial) junto con parches, sprays y chicles siempre y cuando el paciente tenga el deseo de dejar el hábito tabáquico.
El principio activo de la vareniclina es un agoniza que al ocupar los receptores de la nicotina quitan las ganas de fumar y disminuyen la sensación de inhalar humo y nicotina.
A pesar de ello, la ministra reconoce que solamente dejan de fumar el 45 % de las personas que tienen intención de hacerlo, ya que es costoso y no siempre se llevan a cabo las tres medidas; apoyo psicológico, farmacológico y un seguimiento y acompañamiento diario.
Este medicamento que será utilizado en la sanidad pública será recetado en atención primaria pero solo y exclusivamente dentro de un protocolo de deshabituación dado que es necesario que el médico realice el oportuno seguimiento que obviamente, como todo tratamiento no está exento de problemas secundarios.
La ministra ha recordado de igual forma, que solo cuando exista un gobierno operativo, se pondrán en marcha otras medidas de apoyo a esta, entre las que incluyen, la modificación de la ley de tabaco, la regulación del vapeo, los lugares de consumo y la publicidad del tabaco per se.