El personal de Ballet Nacional de España mantiene una huelga discontinua desde el pasado día 18 de junio por sus contratos fraudulentos y la postura intransigente de la directora del INAEM, Montserrat Iglesias, no muestra ningún ánimo de llegar a un acuerdo con los componentes del bellet, que reclaman sus derechos ante la situación prolongada e insostenible “en fraude de ley”.
La responsable del INAEM ejerce la fuerza, incluso, negando la entrada en la sede institucional a la abogada del Ballet, Isabel Lobera, quien intentaba un diálogo con el derecho que le asiste «en calidad de asesora, con voz, pero sin voto», con una oferta de los componentes del BNE para evitar la consecución de esta huelga convocada por el 84 % del colectivo, un total de 42 bailarines, músicos y cantaores, de los cuales 35 son afectados: los siete restantes apoyan incondicionalmente a sus compañeros.
Muy distinta es la actitud del director del Ballet, Antonio Najarro, quien ha adoptado la cómoda postura de no pronunciarse; no obstante, ha dejado caer que a él ya le han “renovado el contrato por otros tres años”. Un golpe bajo que humilla la dignidad de estos artistas magníficos, de una media de 28 años de edad, que componen el Ballet Nacional de España, al que han accedido superando pruebas por convocatorias públicas de extraordinaria dificultad para cada una de sus categorías.
Los trabajadores quieren dejar claro que no quieren cambiar sus contratos sino que “adopten la naturaleza temporal de los mismos y, por tanto indefinida, dando cumplimiento a la doctrina fijada en las sentencias firmes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que ya determinaron en asuntos relativos a compañeros con iguales contratos”.
Este colectivo de artistas que pasean por el mundo la Marca España al mayor nivel, tiene que soportar la presión de la desconsideración de cargos, en este caso del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), vinculado al Ministerio de Cultura Educación y Deportes.
El primer día de huelga, los artistas del BNE, recibieron el inmoral mensaje de prohibición de manifestarse en la calle, autorizando solamente a los cuatro miembros del comité de huelga. Haciendo caso omiso, cada fin de semana, los componentes del BNE al completo a excepción del director, dan la cara a las puertas del Teatro de la Zarzuela para comunicar, con mucho dolor, a las personas que acuden a la representación, que lamentan la situación y piden perdón por no levantar el telón para ofrecer lo mejor de su arte, en el homenaje a Antonio Ruiz Soler, Antonio, el mejor bailarín español de todos los tiempos, que engrandeció la danza española en toda su diversidad, desde la bulería a la jota aragonesa, el zapateado de Sarasate o el aurresku. La respuesta del público, con estos jóvenes que defienden sus derechos, está siendo absolutamente solidaria y aplauden su actitud.
La desafección de los responsables del INAEM, motivó que, el pasado 20 de junio, Isabel Lobera, abogada de los afectados, recurriera directamente al ministro en funciones de Educación Cultura y Deportes, Iván Méndez de Vigo. El ministro fue diligente y sensible ante la situación que le planteaba la portavoz de los componentes del BNE, ordenando al INAEM iniciar un diálogo inmediato de entendimiento con los afectados para subsanar el problema.
La orden del Ministro no les dejó otra salida a los representantes del INAEM. A la reunión con los tres representantes del Ballet Nacional de España acudieron el Secretario General, el subdirector General de Personal y el Jefe de Presupuestos, pero no la directora General, Monserrat Iglesias, “muy contrariada”, dicen, por considerar la reunión como una “imposición”.
Los representantes del INAEM echaron balones fuera, diciendo que ellos no pueden acceder a reconocer los contratos como indefinidos porque “incurrirían en un delito”. A esto, la abogada del BNE responde que es “una estupidez de bulto, cuando, en realidad, incurrir en un delito sería el hecho de presentar a la firma contratos temporales conociendo su ilegalidad”, según ya les han señalado siete sentencias.
Los afectados por esta huelga están abiertos al diálogo, pero es la otra parte la que no ofrece “una solución digna”. No obstante, agradecen la intervención del ministro Méndez de Vigo “aunque no haya servido para nada”: “Sin ánimo de nada, invitamos al ministro a que vea nuestro espectáculo y el esfuerzo que supone levantar el telón”.
En un comunicado hecho público, el BNE expone que, en los últimos años, “hemos visto reducidas nuestras atribuciones, ya muy pequeñas en relación con la exigencia de nuestro trabajo. No obstante, esta huelga no contiene ningún motivo de carácter económico”.
De nuevo, el 28 de junio, los componentes del Ballet Nacional de España han firmado la prolongación de los paros parciales, levantando el telón solamente los miércoles. De momento, también han cancelado la actuación prevista en Carcassonne (Francia).