Lo más insólito que jamás ha sucedido en el Museo del Prado ha comenzado a primeros de octubre de 2017 y terminará el 23. Con el Salón de Reinos como taller, Cai Guo-Qiang, un artista chino multidisciplinar con gran proyección internacional, creará en este espacio los cuadros para una exposición que se alojará en las salas C y D del Edificio Jerónimos a partir del 25 de octubre y que llevará por título El espíritu de la pintura.
Lo más insólito es el material que Cai Guo-Qiang utiliza como principal elemento creador de su arte. Un explosivo, pólvora, que para esta ocasión única ha sido fabricada en Valencia bajo estrictas especificaciones del artista. Y en el Salón de Reinos ayer se ofreció a los medios presentes una muestra de su funcionamiento explosivo controlado sobre el lienzo blanco que dará soporte a los futuros cuadros. Estamos hablando, sí, de la creación in situ de una muestra de arte única y exclusiva para una exposición en la pinacoteca madrileña.
Cai Guo-Qiang, de sesenta años, nació en Quanzhou, provincia de Fujian, China. Cursó estudios de escenografía en Shanghai y a partir de ahí ha abordado múltiples disciplinas artísticas, como el dibujo, la instalación, el vídeo y la performance. Fue en una estancia de nueve años en Japón donde exploró las posibilidades de la pólvora para el dibujo, técnica que ha ido desarrollando hasta perfeccionar sus originalísimas obras de ‘explosión’.
Su éxito no ha sido menor. Ha recibido el León de Oro en la Bienal de Venecia de 1999, el Premio de Cultura Asiática Fukuoka en 2009, el Premio de la Fundación Barnett and Annalee Newman en 2015, y el Premio Bonnefanten de Arte Contemporáneo (BACA) de 2016. En 2012, fue uno de los cinco galardonados por el prestigioso Premio Imperial, que reconoce la trayectoria en las artes, en categorías no recogidas en el Premio Nobel. Además, también fue uno de los cinco artistas que recibieron la primera Medalla de las Artes del Departamento de Estado de Estados Unidos por su destacado compromiso con el intercambio cultural internacional. Cai ha sido también director de efectos visuales y especiales en las Ceremonias de Inauguración y Clausura de las Olimpiadas de Pekín de 2008.
Ha expuesto en Nueva York, en el Metropolitan Museum of Art y en el Solomon R. Guggeheim; en el Museo Nacional de Arte de China en Pekín y en el Museo Guggenheim de Bilbao. En Brasil, en 2013 realizó una exposición itinerante, Da Vinci do Povo, en Brasilia, Sao Paulo y Río de Janeiro; fue la exposición más visitada de un artista vivo en todo el mundo ese año, con más de un millón de visitantes. Ese mismo año en octubre, Cai creó una performance pirotécnica para el festival Nuit Blanche de París, Aventure d’un soir, que recorrió toda la ciudad. ¡Debió de ser impresionante! En los dos últimos años ha expuesto en Yokohama, en Maastricht, en Moscú este mismo año, y ahora en el Prado.
El espíritu de la pintura nace del interés del artista por la espiritualidad de El Greco. También habrá un diálogo con maestros antiguos del Prado, principalmente Tiziano, Velázquez, Rubens y Goya, cuyo objetivo será un acercamiento entre Oriente y Occidente, desde un concepto espiritual de la pintura, convergente en el tiempo. El trabajo de taller culminará el próximo 23 de octubre al atardecer, con la creación de la obra de escala monumental El espíritu de la pintura, que tendrá aproximadamente unos dieciocho metros de largo.
Para dar a conocer al espectador el proceso creativo de esta exposición, el Museo del Prado ha producido un documental único que está dirigiendo Isabel Coixet, la directora cinematográfica española más internacional. Una versión resumida del mismo se proyectará en la sala D del edificio Jerónimos.
El rodaje cuenta con localizaciones en Nueva York, ciudad de residencia de Cai y donde tiene su estudio en Long Island, en Madrid, durante su residencia en el Salón de Reinos, en Valencia y en Toledo.
Con este proyecto excepcional, Cai quiere reivindicar las cualidades que definen el espíritu de la pintura: la sensibilidad del artista, sus aptitudes artesanales y la sensación de aventura que supone trabajar sobre un lienzo en blanco. Por ello, ampliando su personal espíritu pictórico, y pensando en vías de progreso para el arte contemporáneo, los temas y las obras creadas para esta exposición compondrán una progresión rítmica que reflejará la fórmula compositiva china en diferentes secciones expositivas: Introducción o Inicio ascendente (qi), Continuación o Desarrollo (cheng), Giro o Transformación (zhuan) y Unificación o Conclusión (he).
Ficha de la exposición:
- Título: El espíritu de la pintura. Cai Guo-Qiang en el Prado
- Lugar: Museo Nacional del Prado, edificio Jerónimos. Salas C y D
- Creación artística en el Salón de Reinos: principios de octubre a 23 de octubre de 2017
- Fechas exposición: 25 de octubre de 2017 – 4 de marzo de 2018
- Con el patrocinio de: ACCIONA
- El Prado agradece también la generosa contribución de Mr. Silas Chou en esta exposición
