Investigadores del CSIC han descubierto que las alteraciones del sistema nervioso central que dan lugar a cuadros semejantes a la psicosis o a la esquizofrenia, tienen lugar cuando el consumo de cannabis es excesivo. El equilibrio en la transmisión de glutamato y dopamina en el cerebro se rompe y por ello, sobre todo en los jóvenes, se presentan cuadros psíquicos de diversa etiología.
Según los científicos es importante considerar, no solo el abuso de la sustancia, sino los factores hereditarios que determinan que unos jóvenes sean más vulnerables a padecer enfermedades psiquiátricas tras la ingesta de esta droga. Muchas veces, no debutarían estos cuadros de no ser por tener estos hábitos que no solo lo propician, sino que lo aceleran y aumentan su impacto.
El abuso del cannabis rompe el equilibrio entre la excitación y la inhibición lo que sugiere que entren a tener más actividad de la necesaria otros sistemas controlados por el glutamato NMDAR como el dopaminérgico. Los cuadros de psicosis que tienen lugar en algunos consumidores suele debutar cuando el cannabis han sido inhalado pero son reversibles si no se repiten esas conductas. En cambio, ante el abuso y repetición y presencia de esta droga en ese cerebro los daños producidos al sistema nervioso pueden predisponer a la esquizofrenia y a que los daños sean de por vida.
Estos estudios han facilitado que se siga ahondando en el conocimiento de las posibilidades terapéuticas del cannabis que pueden ser útiles para reducir la influencia negativa en procesos como son la esquizofrenia y a desarrollar otros fármacos que traten la psicosis cannábica. El sistema cannabinoide endógeno es beneficioso ya que controla la excitabilidad del glutamado NMDAR que es esencial en los procesos como la memoria y el aprendizaje.