Palabra de actor, 22 horas, sala Esmark, puso en escena un monólogo o conferencia dramatizada del actor Maurice Dourozier, du Théâtre du soleil, sobre “la paradoja del comediante” vivida por él mismo. Algo que podía haber resultado un éxito pero que fue bastante rollo repetitivo, salvado apenas por los escasos momentos de emoción. Su joven entrevistadora se comportó como rémora inmovilizándolo hacia atrás: Ella no entendía, de acuerdo, pero de los demás se esperaba que sí entendiéramos. Bien conducido, hubiera salido mejor.
Mientras esto ocurría, los brasileños Favelacult Gestión Cultural llevaban su espectáculo Peu Murray y los tambores de neumáticos desde Los Sitios hasta la muralla, para acabar con un concierto en Registro. Lástima que este concierto no se prolongara hacia la noche, porque cuando volvíamos cuesta arriba hacia Los Sitios, ya estaban recogiendo. Nos hubieran contagiado sus ritmos neumáticos.
Mix. 23’30 Patio de Los Sitios por Spasmo Teatro. Otro caso de empatía indudable con la Feria. Hagan lo que hagan, el público ríe complacido, nunca harto y yo diría que hasta orgulloso. Esta vez, como reza el título, Mix, era un conjunto de sketches que deben estar entre lo mejor de su biografía, pues el público, erre que erre, reía y aplaudía sabiéndolos de antemano desde el mismo momento en que asomaban la jeta como diciendo «qué bocado exquisito me voy a volver a zampar». Hay que reconocer que ellos lo suyo lo bordan, que esos movimientos y esas caras han debido pasar horas y horas ensayándose para conseguir esos grados de torpeza, maldad y estupidez juntas, y que Chaplin, el Gordo el Feo y el Flaco y los hermanos Marx y muchos otros genios de la caricatura, han sido sus modelos. Gárgolas desprendidas de la catedral de Salamanca. Yo miraba para atrás a ver qué es lo que les hacía reír tanto, pero tanto tanto; ellos seguían ciegos al escenario sin reparar, y eso ya es un espectáculo digno de verse.
Y con este Mix se coronó la Feria en su 17ª edición