Investigadores de la Universidad de Tel Aviv (Israel) y de la Universidad de Linköping en Suecia, han desarrollado una prótesis de retina a través de pigmentos orgánicos que están disponibles sobre tintas de impresión y cosméticos que podrían ser el primer paso para restaurar las retinas que actualmente están degenerando por algún tipo de distrofia macular.
Este trabajo, publicado en Advanced Materials, ha determinado que con la creación de una película fotoactiva que convierta los impulsos de luz en señales eléctricas que a su vez, estimulen las neuronas, se puede hacer que la pérdida visual se restaure en humanos en los años venideros.
«Hemos optimizado la película fotoactiva para la luz infrarroja cercana ya que los tejidos biológicos, como los huesos, la sangre y la piel, son más transparentes a estas longitudes de onda. Esto plantea la posibilidad de otras aplicaciones en humanos en el futuro», han dicho los expertos.
La retina está compuesta de diversas capas de células; las neuronas sensibles a la luz situadas en la parte posterior del ojo, convierte la luz incidente en señales eléctricas mientras que las otras células procesan los impulsos nerviosos transmitiéndolos hacia adelante a lo largo del nervio óptico hasta la corteza visual.
Esta retina artificial sería una delgada película circular de material fotoactivo parecida a un pixel individual de un sensor de la cámara digital, que sería unas cien veces más fina que una sola célula.
La retina pretende estimular no solo las neuronas del cerebro sino las neuronas de las retinas que actualmente por alguna distrofia no funcionan, añade uno de los investigadores.