El nuevo partido Podemos, nacido al calor de las protestas contra la austeridad en España, es ya la primera opción para los votantes españoles a un año de las elecciones generales, según un sondeo que publica este domingo el diario El País, informa Andes.
Si las generales «tuvieran lugar mañana», Podemos obtendría el 27,7 % de los votos, por delante del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que lograría un 26,2 %, y el gobernante Partido Popular (PP, derecha), que tendría el 20,07 %, según la proyección de El País.
En las elecciones generales de 2011, el PP había conseguido el 44,6% de los votos, mientras que el PSOE obtuvo el 28,7%.
En las elecciones europeas de mayo, que supusieron su presentación en sociedad, Podemos, que se sitúa a la izquierda de los socialistas, fue la cuarta formación más votada con un 8% de los sufragios y cinco escaños en el Parlamento Europeo, a pesar de haberse constituido oficialmente como partido apenas cuatro meses antes.
«Nunca antes una formación recién creada había alcanzado una expectativa de voto tan alta como la que Podemos ha logrado en sólo ocho meses de vida», afirma el diario.
Podemos, que lidera el profesor universitario Pablo Iglesias, ha sabido capitalizar el descontento ciudadano con los efectos de la crisis económica, en un país con casi un cuarto de su población activa en paro, y los escándalos de corrupción que afectan principalmente a los partidos tradicionales.
Los fundadores de Podemos, todos ellos profesores de Políticas o expertos en Ciencias Sociales, no han cambiado su postura con respecto a las encuestas desde el nacimiento de la formación, tres meses antes de las elecciones europeas del 25 de mayo. La palabra clave que todos repiten desde entonces ante las proyecciones demoscópicas es prudencia.
“Desde que lanzamos la iniciativa y desde las elecciones europeas hay una tendencia clara”, razona Íñigo Errejón, promotor del movimiento y miembro del equipo de Pablo Iglesias. Y la clave de esa tendencia, según su análisis, es que España se encuentra “en un tiempo político en descomposición”, La crisis del bipartidismo, los casos de corrupción que alcanzan a las dos principales fuerzas políticas (PP y PSOE) o el escándalo de las tarjetas black de Caja Madrid, que afecta también a Izquierda Unida, contribuyen a generar un clima en el que destaca “una sensación de cambio en el que lo viejo no va a dar más de sí”.
‘Errores de los otros’
Así, un 42 % de los encuestados que muestran su intención de votar a Podemos lo hace por «una sensación de decepción y desencanto con los demás partidos», frente al 33 % que afirma que lo haría porque «es el partido que más se acerca ahora a lo que piensa y cree».
«Podemos se alimenta sobre todo de los errores de los otros», añade el diario para explicar que un 54 % de los encuestados considera que las propuestas de esa formación no son realistas, mientras que un 50 % cree que no tienen ideas claras sobre lo que hay que hacer para salir de la crisis.
La formación es vista por sus adversarios como populista, pero a principios de octubre, el partido aprobó una resolución económica que no habla del impago de parte de la deuda pública en España, tal y como defendieron en su programa electoral para las europeas.
Sus líderes hablan ahora de un proceso de reestructuración ordenada de la deuda para volver a niveles de deuda más sostenibles.
Esta resolución forma parte de un intento de atraer a un electorado de centro izquierda, de cara a las elecciones generales de finales de 2015.
«La opinión pública aparece hoy más dividida que en el último decenio», afirma el diario en un editorial, que asegura que «de la alta concentración de votos en torno a dos partidos estatales -más algunos nacionalistas- se ha pasado a una fragmentación de opciones».
«El futuro no está escrito pero hay que prepararse para un posible escenario de Gobiernos de más de un partido, también al frente del Estado», añadió El País.
Los resultados de la encuestan reflejan «el estado de indignación y convulsión de la ciudadanía», afirmó en una entrevista con la televisión Telecinco, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, quien frente al resultado que le augura la encuesta considera que el PSOE ya «ha frenado su deterioro y está empezando a crecer en intención de votos».
La encuesta de Metroscopia para El País se hizo el 28 y 29 de octubre por medio de 1000 entrevistas telefónicas, en medio de una semana marcada por un nuevo escándalo de corrupción de concesión de obras públicas por comisiones.
Por ello, El País considera que «el sondeo es una instantánea del estado de ánimo ciudadano más que una predicción de voto».