FETÉN, la Feria Europea de Teatro para Niños, ha celebrado en Gijón, entre los días 21 y 26 de febrero de 2016, su 25 aniversario, y uno de los actos que discurrieron paralelos fue la presentación, el jueves 25 de febrero, del 40 aniversario de una de las compañías con más solera de España, La Tartana (Madrid) especializada en títeres.
Precisamente La Tartana fue una de las compañías que allá en los años 70 del pasado siglo pasaron por La Laboral de Gijón en lo que era ya por aquel entonces el germen de lo que décadas más tarde sería FETÉN. Testigos había en el acto que habían presenciado aquella hazaña y dieron fe de ella.
Hoy en día, con 43 espectáculos a sus espaldas, siempre a golpe de taller, se puede afirmar que La Tartana ha creado un estilo propio fruto de la experimentación e investigación del movimiento y la escena en el marco del teatro independiente.
He aquí algunas notas sobre la Compañía que extraigo del discurso de uno de sus fundadores y actual director de La Tartana, Juan Muñoz, tal como fue pronunciado en FETÉN:
En 1977 La Tartana estrena su primer espectáculo, “Polichinela”, un clásico de los «títeres de guante» que anunciaba ya el interés de esta compañía por el mundo de las marionetas.
Desde entonces, ha estrenado nada menos que 37 espectáculos que han viajado en furgoneta por medio mundo y conocido muchos grandes festivales. Su idea fue siempre experimentar con todo tipo de marionetas, jugar con materiales, tamaños, luces y colores. Y a través del trabajo, dar vida a los muñecos.
Pero para conquistar la calle, sus primeros espectáculos recorrieron, a la manera de Lope de Rueda, las plazas y los parques de los pueblos españoles y de toda Europa. “Atracciones de Tartana” (1979) o “Pasacalles 80” (1980) fueron sus primeras obras.
El éxito de los espectáculos de calle, unido a las ganas de crecer, les dio la fuerzas para atreverse a entrar dentro de los teatros. Así han revivido a grandes reyes como “Lear” (1987) o famosas óperas como “La flauta mágica” (1988).
Desde su espectáculo “La roca y la colina” (1996) la compañía se centra en espectáculos para el público infantil, donde mezclan la experiencia, la técnica y la calidad de los espectáculos con una tarea pedagógica y educativa. La Tartana ha demostrado que no sólo busca contar una historia, sino recrear un mundo. A través de su cuidada estética, tanto la escenográfica como los títeres, trasladan a escenarios fabulosos de refinada fantasía.
Después estrenarían “Frankestein” que se llevaría en 1998 el Premio Max de la Artes Escénicas y que cautivaría a todo tipo de público.
Juan Muñoz descubrió su pasión por los títeres de la mano de Paco Peralta, uno de los más famosos constructores de marionetas y de espectáculos de teatro. Desde hace unos años está centrado en la construcción y dirección de obras, a las que sin miedo a innovar siempre añade su sello propio.
En 2005. se une al equipo Inés Maroto, del mundo de las bellas artes y con una sensibilidad especial con los niños. El nuevo equipo estrenará la fantástica ópera de Ravel “El niño y los sortilegios”, un proyecto arriesgado por ser ópera para los más pequeños pero que les trajo tres años en gira, con los que este espectáculo recorrió todo tipo de teatros.
A partir de ahí el nuevo equipo se enfrentó a historias como “El Quijote” o “Piratas”. Y más tarde historias propias como “Petshow”, “Historias de derribo” o “Vacamioneta”, sobre un juguetero que da vida a la manera de Gepetto, a los juguetes creados.
Los últimos estrenos aún continúan en cartel: “Monstruos en la maleta” es la historia de dos seres que nacen separados y que tendrán que enfrentarse solos a los retos de la vida para encontrarse y aprender a convivir.
El año pasado La Tartana volvió a arriesgarse con una ópera infantil, escogiendo la historia “Hansel y Gretel”, con el que la Compañía volvió a combinar ópera y público infantil.
Tras su incursión en el musical, llega “El Guardián de los Cuentos”, con el que dan el salto a África de la mano de AECID.
Con “El Sueño del Pequeño Guerrero”, mostrado en Madferia 2015, La Tartana recupera el trabajo con el títere más clásico, trayendo los rincones más increíbles de África a nuestros teatros.
Por último, con “Atrapasueños”, exhibida por tres veces en FETÉN 2016, ha vuelto a ser seleccionada para Teatralia. Y todavía les quedan historias que contar, títeres que crear y mundos que explorar.
Entre los proyectos que piensa llevar a cabo la Compañía para compartir la celebración de su 40 aniversario, está la producción de un espectáculo homenaje a su larguísimo y exitoso recorrido. En paralelo, se encuentra ya en ciernes lo que será la realización de un documental sobre su trayectoria, documental del que ya hemos visto un extracto en FETÉN 2016. A éste seguirá la publicación de un libro para amantes de las Artes Escénicas, así como distintos eventos con algunas instituciones implicadas en su trayectoria.
