Nuestro colega Gervasio Sánchez ha hecho público que una treintena de personas se han organizado para presentar una denuncia de estafa contra la empresa y escuela de fotoperiodismo Reporter Academy y la asociación sin ánimo de lucro Kevlar Fotoperiodistes, a las que abonaron cantidades variadas para preinscripciones de cursos programados con un año de antelación y que nunca se realizaron tanto en Bosnia como en el Sahara.
A pesar de la suspensión de los cursos esta treintena de personas (es muy posible que el número sea superior), la mayoría jóvenes estudiantes, nunca recibieron la devolución del dinero adelantado, señala Gervasio Sánchez, quien cuantifica que esta empresa o escuela se ha apropiado indebidamente de más de 18.000 € de 30 alumnos de diversos cursos de Fotoperiodismo o Fotografía Práctica, programados en el Sáhara Occidental y en Bosnia.
Gervasio Sánchez identifica como responsable de esta estafa es Albert Cusidó Garriga, director de Reporter Academy, con domicilio en Sabadell (Barcelona), en un comunicado en el que facilita la siguiente información:
En el verano del 2012 varios de los alumnos hicieron ingresos de preinscripción para habilitar billetes de avión y viajar al Sáhara Occidental, con la aerolínea Air Algerie, con la intención de hacer un curso de fotoperiodismo en Tinduf.
Al producirse el conflicto en Mali, desde Reporter Academy se informó deque el viaje, que estaba previsto para febrero del 2013, se anulaba ante la posibilidad de que grupos yihadistas hubieran cruzado el Sahel hacia los campamentos en Tinduf. Hasta aquí todo parecía comprensible
Antes de que empezara el conflicto en Mali, la mayoría de los participantes hizo un segundo pago a Albert Cusidó para completar el precio del viaje. Incluso Albert Cusidó recopiló pasaportes de alumnos para el trámite de visados.
Dos de las alumnas inscritas todavía no han recuperado su pasaporte a fecha de hoy, a pesar de numerosos requerimientos, y tienen presentada denuncia policial por este hecho.
A pesar de que se había cancelado el curso en febrero de 2013, Albert Cusidó indicó a los alumnos que se quedaba el dinero porque el curso se haría en Semana Santa de 2013, dos meses después. No obstante, dio opción de devolver el dinero.
Las personas que eligieron la devolución tuvieron bastantes problemas con Albert Cusidó para recuperarlo. Algunos consiguieron recuperar su dinero después de llamar repetidas veces y enviar bastantes mails (hay que tener en cuenta que por esta época Reporter Academy seguía ofreciendo otros cursos en los Balcanes y no le interesaba el ruido que podía provocar el tema de no haber abonado las devoluciones), pero es conocido, al menos, el caso de una persona que se apuntó al curso del Sáhara a través de la Asociación de la Prensa de Madrid y no consiguió que le devolvieran lo pagado hasta que actuaron los abogados de la Asociación.
Desde Semana Santa de 2013 hasta abril de 2014, Albert Cusidó aplazó varias veces el curso hasta que definitivamente lo suspendió y se comprometió a hacer las devoluciones en 25 días, según la normativa interna de su empresa.
Nadie recibió devolución alguna y Albert Cusidó dejó de contestar a los correos, dio de baja el teléfono fijo y no respondió al único móvil de contacto de que se dispone. Durante los meses de septiembre a diciembre de 2014, Albert Cusidó no contestó a ningún mail que tuviera que ver con las devoluciones del Sáhara, pero la página web de Reporter Academy siguió en funcionamiento con un calendario de cursos programados para diciembre de 2014 y Semana Santa de 2015 en los Balcanes.
Paralelamente, en septiembre de 2014, bajo el nombre de Escola de Fotoperiodisme a Ravno (Bosnia Herzegovina), y bajo el paraguas de Reporter Academy según se indicaba en el folleto editado, organizó una promoción de un curso práctico de fotografía en los Balcanes para personal docente de centros de enseñanza de Cataluña, con opciones de inscripción para Semana Santa de 2015 y verano de 2015.
Utilizó otra cuenta de correo y firmó su propuesta como Jordi Matarín, no como Albert Cusidó. Este nombre de Jordi Matarín se parece sospechosamente al de su exsocio Jordi Martí, si bien los receptores de dicha promoción, desligada ya del mundo del periodismo por el perfil de destinatarios a los que se dirigía, desconocían la historia anterior de Reporter Academy.
Además, para los cursos que promocionó en su web para diciembre de 2014 y Semana Santa de 2015 en los Balcanes, se dirigió a los alumnos que se habían apuntado indicándoles que hicieran difusión de los mismos pues afirmaba disponer de subvenciones de la Unión Europea y les indicó que sería una lástima perder tales subvenciones, animándoles a buscar nuevos alumnos para los cursos.
Por muchos esfuerzos que se hicieron anteriormente en las redes sociales para denunciar los hechos públicamente antes de septiembre de 2014, algunas personas pagaron preinscripciones para asistir a los cursos de diciembre de 2014 y Semana Santa de 2015 en los Balcanes que obviamente nunca se materializaron. Dos alumnas se enteraron de que el curso de diciembre no se iba a realizar a su llegada a Barcelona provenientes de Londres pocas horas antes.
Queda demostrado que Albert Cusidó actuó deliberadamente con intención y malicia, orquestando una estrategia de fraude, para cobrar preinscripciones, o dilatar devoluciones de importes ya cobrados, argumentando que se realizarían cursos anteriormente cancelados, sin tener la más mínima intención de desarrollar tales cursos.
Tras recibir presiones por parte de algunos de los afectados vía mail, se consiguió que cerrase la página web y la página de Facebook de Reporter Academy a final de enero de 2015. Pero varias personas ya habían pagado las preinscripciones para el viaje de Semana Santa de 2015 cuya promoción la hizo con un nombre falso.
Todos estos afectados se han organizado para recopilar información y presentar una demanda conjunta por estafa. Evidentemente, pueden quedar otras personas que hayan sido estafadas y no hayan descubierto en redes sociales que existe un grupo de afectados que se hayan organizado conjuntamente para reclamar los pagos pendientes y denunciar las actividades fraudulentas de Albert Cusidó como director de Reporter Academy, que incluso se inventó una relación con la Universidad Autónoma de Barcelona nunca reconocida por este organismo.
También se detectaron irregularidades en los viajes efectuados, pues indicaba disponer de seguros que cubrían las actividades pero es conocido que frente a algún robo de material fotográfico a algún alumno en uno de los cursos en Bosnia, y a pesar de que afirmó que el seguro cubría el incidente, este alumno nunca fue resarcido por tal hecho. Muy probablemente sea falso que haya dispuesto de seguros en los viajes, aunque así lo afirmaba en sus correos y promociones.
Los viajes a los Balcanes se hacían en furgonetas alquiladas desde Barcelona hasta Bosnia. Todas las furgonetas del 2014 se alquilaron a una empresa que colabora con la Universidad Autónoma de Barcelona y supuestamente a través de ella. A esta empresa le debe los alquileres de todos los viajes más gastos del viaje que la empresa asumía y luego se facturaban. Albert Cusidó tiene otra deuda de 18.000 euros con esta empresa.
El 11 de febrero de 2015, Albert Cusidó Garriga escribió un mail de disculpa a uno de los portavoces de los afectados, admitiendo toda la culpabilidad. Diciendo que iba a pagar a todos y cada uno de los afectados a través de su abogado, dándose un plazo hasta el 1 de mayo de 2015, pero se comprometió personalmente a arreglar en un plazo de dos semanas alguna devolución. Ante este cambio de rumbo, se le pidió que pasase el contacto de su abogado para concretar un plan de pagos, o bien lo indicara él. Solamente se tiene constancia de una devolución por importe de 500 €. A mediados de mayo se volvió a comprometer a solucionar el problema en dos semanas. Todos los plazos que él mismo se ha impuesto han sido incumplidos.
Se contactó con la Oficina del Consumidor -OMIC- de Sabadell que se ofreció como mediador. La OMIC envió a Albert Cusidó una carta certificada cuyo acuse de recibo fue firmado por el propio implicado o un familiar cercano.
La OMIC admitió que había indicios de delito por «Apropiación Indebida». La misma oficina del consumidor de Sabadell animó al grupo de afectados a llevar el caso directamente a la fiscalía para que ésta actuase de oficio.
La fiscalía, con fecha de 17/03/2015, indicó que debía presentarse denuncia formal en comisaría de Mossos de Esquadra para tramitar un expediente conjunto de todos los afectados.
Desde el 14 de abril hasta el 27 de mayo, once personas afectadas por la estafa han presentado una denuncia conjunta contra Albert Cusidó en las comisarías de Mossos de Esquadra de Sabadell, de Gracia y Plaza España en Barcelona y comisarías de la Policía Nacional en Ponferrada (León), Coslada (Madrid) y Zaragoza.
Durante los meses de julio de 2013 y 2014, yo mismo, Gervasio Sánchez, realicé dos talleres en Srebrenica con Reporter Academy entre los días 9 y 11 de julio de ambos años, fechas conmemorativas de la matanza producida en ese enclave hace 20 años y coincidiendo con un funeral masivo que se celebra cada año.
Los honorarios pactados en 2013 tardé varios meses en cobrarlos y nunca se me abonó ni los gastos de viaje ni los honorarios del taller de 2014.
A finales de agosto de 2014 recibí el primer mensaje a través de Facebook de una alumna que se había preinscrito en un curso que se iba a celebrar en esas fechas y que acabó suspendiéndose. Por supuesto, nunca recibió la devolución ni una explicación coherente sobre lo ocurrido.
En los meses siguientes hasta hoy mismo he estado en permanente contacto con los afectados y he mandado varios mensajes a Albert Cusidó insistiéndole en la gravedad de la situación y en la necesidad de buscar una solución que evitase las denuncias. Los afectados han tenido una paciencia infinita en un intento de evitar la judicialización del caso, pero las continuas mentiras de Albert Cusidó lo han impedido.
Es increíble que este personaje, que sólo puede ser descrito como un auténtico estafador, se haya aprovechado de la buena voluntad de alumnas y alumnos, en su mayoría, muy jóvenes, y haya utilizado un lugar simbólico como Srebrenica para urdir un negocio personal.
En mi caso recuperar lo que me debe es lo que menos me preocupa. Jamás aceptaría recibir un solo euro antes de que devolviese todo lo que ha estafado a las alumnas y alumnos.
Personalmente, me siento culpable porque estoy seguro de que algunos alumnos se han fiado de esta empresa al ver mi nombre entre las personas que han participado en sus talleres aunque evidentemente jamás hubiera mantenido ninguna relación con un estafador si hubiera conocido la más mínima información sobre un caso claro de estafa.
Ojalá algún día un juzgado obligué a Albert Cusidó a devolver todo el dinero estafado y a dar explicaciones de un comportamiento tan abyecto.
Os ruego que deis a conocer este texto para evitar que se vuelvan a producir situaciones tan dañinas como la provocada por Albert Cusidó y Reporter Academy.
Gervasio Sánchez