El artista quebequense Gilles Morissette mantiene la imposibilidad de explicar el arte, ni el suyo ni ningún otro, puesto que ningún arte puede ni debe ser explicado: «Yo no estoy aquí para explicaros mis obras sino para daros las claves interpretativas de los momentos en que se produjeron estas instalaciones y el por qué de los materiales. a fin de que vosotros podáis elaborar un significado de las mismas.»
Gilles Morissette se expresó así en la presentación de la exposición titulada Eclat d’être, a primeros de octubre de 2016, en la sede de Alianza Francesa en Madrid, en la que estuvo acompañado por el embajador de Canadá en España, Mathiew Levin.
Su arte es declarada y abiertamente conceptual y tiene un significado explícito en cuanto a sus motivaciones, características y objetivos, lo que no impide que cada cual se pueda forjar una interpretación acorde con su manera de ver el mundo. Declara a este propósito Gilles Morissette que todos los hombres son artistas creativos sin necesidad de llevar sobre sus hombros el marchamo del artista «porque cada uno en su ámbito puede realizar a cada instante, con sus acciones o sus pensamientos, un acto de creación, y también como espectador tiene la facultad de crear y recrear una obra de arte.»
De ahí que la base de su arte conceptual sea el Ser (Être), y de ahí que se subrayen conceptos tan simples en apariencia como Ser-Aparecer-Desaparecer, que tanto en español como en francés son derivaciones del Ser.
La obra se articula entre el blanco y el negro, la luz y la sombra, la transparencia y la opacidad. El acto deambulatorio del espectador completa la obra con el hecho de existir en un espacio/tiempo. Los materiales utilizados van del papel de materia blanca plateada reflejando la luz ambiental al papel de materia negra con inscripciones dadas por la luz y las transparencias.
De este modo «Éclat d’être» (Estallido del ser), título genérico de la exposición, es una instalación de tres obras pensadas para la sala de exposiciones de la Alliance Française de Madrid, de las cuales la obra cumbre, «Éclat d’être», hecha en papel de materia blanca plateada reflejando la luz ambiental, ocupa uno de los principales murales de la entrada. A lo largo de su desplazamiento en el espacio, el espectador está llamado a descubrir, en esta blancura luminosa, la integración de un texto sobre la creación.
En contraste, el espacio del centro se compone de un mural rojo vestido por una camisa negra (en su formato original son tres las camisas, si bien la exposición de Madrid sólo muestra la primera de ellas suspendida del techo). Hecha en papel de materia negra, la camisa lleva/vela una inscripción que habla del ciclo de la vida (Ser-Aparecer-Desaparecer). Al estar más delimitado este espacio, permite crear un juego de sombras y luces multiplicando las formas del cuerpo sugeridas por la camisa.
Finalmente la instalación Hanford, Washington et Livingston, Louisianais, le 11 février 2016, fecha cuyo significado se explica, es creada directamente en el mural más grande del espacio con vendas de papel de materia blanca variando de la opacidad a la transparencia que forman dos espirales en interacción. Para comprender esta obra y sus puntos de vista, el espectador necesita desplazarse en una metáfora sobre el tiempo y el espacio. Estas dos espirales son también los testigos de nuestra existencia, dado que hace muy poco que las ondas gravitatorias causadas por sus violentas colisiones se han unido a nuestro planeta.
- Alianza Francesa de Madrid Cuesta de Santo Domingo, 13
- Del 6 de octubre al 8 de noviembre de 2016