Había desafiado al destino, Hanka Horka, cantante del grupo de folk checo Asonance, falleció a los 57 años el pasado domingo, 16 de enero de 2022, a consecuencia de una infección de COVID-19.
La cantante, quien se había declarado contraria a vacunarse, se contagió deliberadamente para conseguir así el pasaporte sanitario que en su país –donde ese mismo día la cifra oficial de contagiados ascendió a más de 200.000 personas- se exige para entrar en los acontecimientos culturales y deportivos, así como para frecuentar bares y restaurantes, según ha informado su familia.
Entrevistado en la radio pública iRozhhlas, Jan Rek, hijo de la fallecida, ha explicado que su madre se expuso voluntariamente a contraer la enfermedad antes de Navidad, conviviendo sin precauciones con él y su padre quienes, a pesar de estar vacunados, se encontraban recluidos en la casa familiar tras haberse contagiado: «Decidió seguir haciendo vida normal con nosotros y prefirió contagiarse antes que vacunarse».
Dos días antes de fallecer, Hana Horka escribió en sus redes sociales: «He sobrevivido…De nuevo volveré al teatro, la sauna, los conciertos…y se impone un viaje urgente al mar».
El joven Rek ha acusado a las figuras locales del movimiento antivacuna de haber convencido a su madre, diciendo que «tienen las manos manchadas de sangre. Sé exactamente quienes la convencieron para que no se vacunara. Me entristece que creyera más a unos extraños que a su propia familia».
