La investigadora franco-iraní Fariba Adelkhah, retenida en Irán desde 2019 acusada de atentar contra la seguridad nacional, ha sido encarcelada de nuevo en Teherán este 12 de enero de 2022.
«Con estupor e indignación recibimos la noticia de que Fariba Adelkhah ha sido encarcelada de nuevo en la prisión de Evin», ha dicho el comité de apoyo de la científica en un comunicado en el que denuncia la «cínica» actuación del poder iraní que utiliza el caso de la investigadora «con fines internos o externos opacos» que, según el comunicado del ministerio francés de Asuntos Exteriores, que exige su liberación inmediata, «solo pueden tener consecuencias negativas en las relaciones entre Francia e Irán, y reducir la confianza entre ambos países».
Detenida en junio de 2019 junto a Roland Marchal, ambos investigadores del Centre de recherches internationales de Sciences Po (CERI), y condenada en mayo de 2020 a cinco años de cárcel por atentar contra la seguridad nacional, se encontraba en residencia vigilada con brazalete electrónico desde el 3 de octubre de 2020, cuando obtuvo un permiso carcelario para salir y seguir un tratamiento médico.
Hasta este momento, que coincide con el hecho de que Irán y varios países (Francia, Reino Unido, Alemania, Rusia, China e indirectamente Estados Unidos) hayan reanudado en noviembre pasado las conversaciones para salvar el acuerdo de 2015 de impedir que Irán se dote del arma nuclear.
Rolan Marchal quedó en libertad en marzo de 2020, intercambiado por un ciudadano iraní que se encontraba preso en Francia.
«Mientras la pandemia de Covid sigue en pleno apogeo –denuncia el Comité de apoyo a la investigadora- el gobierno iraní pone deliberadamente en peligro la salud y la vida de Fariba Adelkhah. La muerte, el sábado pasado, del poeta y realizador Baktash Abtin, mientras se encontraba encarcelado, demuestra la incapacidad y su falta de voluntad del régimen para garantizar la seguridad de los detenidos».
El poeta, cineasta y disidente Baktash Abtin falleció en la cárcel tras contraer la COVID-19, según la denuncia de diversas organizaciones de defensa de los derechos humanos, que acusan el gobierno de Teherán de ser responsable de su muerte.
Según la prensa francesa, Irán retiene a varios ciudadanos que tienen doble nacionalidad, a los que habitualmente acusa de espionaje.
El anuncio de que Fariba Adelkhah ha regresado a la cárcel coincide con el comunicado del British Council, organismo que promociona la cultura británica en el extranjero, celebrando el regreso al Reino Unido de Aras Amiri, trabajadora de este organismo, recién puesta en libertad en Irán donde fue condenada en 2019 por espionaje.