Reporteros sin Fronteras (RSF) ha denunciado el comportamiento «inaceptable de las fuerzas de seguridad marroquíes» que suponen un «obstáculo» en la labor informativa de los periodistas, tras conocerse que dos periodistas del canal Tamazight TV fueron agredidos por un jefe policial y varios agentes mientras trabajaban en la ciudad marroquí de Tiflet.
Los dos periodistas, Souad Wasef y el cámara Mohamed Bouljihel, estaban informando el pasado martes 5 de mayo sobre la actividad en un mercado en Tiflet, localidad de 80.000 habitantes de la región de Rabat, cuando fueron atacados de forma física y verbal por los agentes del orden.
En concreto, Bouljihel fue herido en un brazo tras el ataque, al intentar evitar que la policía confiscara su cámara, además de ser abofeteado y tirado al suelo.
El hecho fue denunciado por el Foro Marroquí de Jóvenes Periodistas (FMJJ, siglas en francés).
Se da la circunstancia que en la misma localidad, meses atrás, la policía durante una intervención sacó las armas de fuego para efectuar una detención.
El director de la oficina de RSF en el norte de África, Souahieb Khayati, declaró que la crisis sanitaria «no debería ser una oportunidad para atacar a los periodistas que intentan hacer su trabajo», y ha solicitado que los agentes de policía involucrados «sean identificados y sancionados».
También el Sindicato Nacional de la Prensa Marroquí (SNPM) condenó la «brutal agresión» señalando su conmoción por este «abuso de autoridad» solicitando al Ministerio del Interior que investigue lo ocurrido.
Por su parte, la Dirección General de Seguridad Nacional (DGSN) ha negado que existiera prohibición para filmar y añadió que no se trataba de policías sino de fuerzas auxiliares dependientes del Ministerio del Interior.
Tamazight TV es un canal bereber que forma parte de la Sociedad Nacional de Radio y Televisión de Marruecos (SNRT).
Retirada provisional de la conocida ‘ley mascarilla’ 22-20
El incidente se produce durante el estado de confinamiento que se extiende hasta el 20 de mayo y que incluye un toque de queda nocturno en Marruecos.
También durante este periodo se ha intentado aprobar la ley 22-20 que restringe aún más la libertad de expresión y que es conocida popularmente como ‘ley mascarilla’.
El Gobierno marroquí anunció el jueves 7 de mayo que posponía hasta el final del estado de emergencia este proyecto. Después de una reunión de la coalición gubernamental formada por cinco partidos, su portavoz, Said Amzazi, anunció que se harán consultas con los sectores afectados.
Esta renuncia momentánea al proyecto se produce después de las críticas de veinte ONG, la oposición política, activistas, blogueros y grupos de derechos humanos.