Relaciones de poder, manipulación, instrumentalización… además del sexismo y desigualdades varias.
Los mercados de todo tipo, utilizan a la mujer y al hombre para su beneficio, incitándoles este sistema mercantil capitalista neoliberal a gastar por encima de sus necesidades instrumentalizándolos, para que los plutócratas disfruten de su estado de bienestar, con todas los medios que les apetezca y deseen. Así la oligarquía está contenta, porque siguen viviendo muy por encima de las posibilidades de la pobreza que generan.
Como este sistema se basa en la creencia de que si la oligarquía neoliberal está feliz, el resto del mundo también tiene que estarlo, entonces se estará alegre si se tiene: un móvil de última generación, pocas arrugas, dientes perfectos, visión perfecta, un coche, una casa, un novio, una novia, una familia, hijos e hijas, aunque sean por vientres de alquiler, mucho sexo pagado o abusado, un trabajo no precario (algo cada vez más difícil)… y si la precarización está siendo inminente ¿de dónde se sacará el dinero? ¿Y la felicidad?
Aunque por mucho que no lo quieran, hay vida más allá del tener, es decir, la que está en el ser con todas nuestras cualidades particulares que nos hacen únicas y únicos, lejos de sexismo, roles de género, relaciones de poder, consumismo, pornografía, esclavitud sexual, imposición mercantil, móviles, alienación…
Por tanto la cuestión es retomar lo que realmente nos hace humanas y humanos, así cabe preguntarse:
¿Dónde se enseñan las relaciones de respeto y empatía, en las que entre sus características fundamentales están la autonomía y la responsabilidad, y no la dependencia?
¿En qué lugar se educan los sentimientos y emociones de aprecio, atención y estima, en vez de narcisismo, el uso y abuso de las personas?
¿Adónde encontrar los comportamientos de escucha activa, condición necesaria para llegar a acuerdos desde la consideración, en vez de la imposición, control, dominio y manipulación?
¿Dónde se enseña una sexualidad sana, en la que las relaciones sexuales sean de respeto y empatía, responsabilidad, atención, acordadas, en vez de impuestas por el machismo abusador experto en pornografía, esclavizar mujeres, abusarlas y violarlas?
¿Por qué se sigue creyendo en un sistema que solo respeta a quien tiene dinero y poder?
¿Cuál es la razón por la que tiene más aceptación y veneración la gente que se muestra con poderío, en vez de la respetuosa?
Mucus desde su sección en Babia nos habla:
DE LA PARIDA A LA PAREADA DE DE UNA MUJER LIBERADA:
¡De tanta instrumentalización,
me cisco en la manipulación!
Del poderío me río,
de la sumisión no me fío.
Mucus esputa:
Más vale quererse a tiempo
que obedecer año tras año…