Ernesto Carmona Ulloa
Militares hondureños ocuparon hoy las antenas y transmisores de Globo Radio y Globo TV, en Cantagallo, Tegucigalpa, con el pretexto de dar «protección» a los medios. La militarización ha causado profunda inquietud entre propietarios y trabajadores de los medios afectados.
Las incidencias del acto electoral que se celebra hoy en Honduras están marcadas por arbitrariedades, como cambio de lugares de votación horas antes del comienzo del acto electoral y cohecho abierto y desenfadado en las calles, informa Radio Globo de Tegucigalpa.
Muchos centros de votación tampoco han sido abiertos a los electores. Las antenas transmisoras en Cantagalolo de Radio Globo, Globo TV, Canal 11 HonduRed y de otros medios radioeléctricos fueron ocupadas por fuerzas militares bajo el pretexto de darle seguridad a los medios, que tampoco la solicitaron ni se la ofrecieron durante los últimos años. Ninguna autoridad, militar ni civil, se ha responsabilizado de la militarización de las instalaciones. Esta ocupación militar afecta solamente a los medios que mantienen una postura crítica del golpe cívico militar de 2009 y posterior dictadura. Esos mismos transmisores fueron destruidos en 2009.
En Honduras se encuentran numerosos observadores internacionales, entre otros Baltasar Garzón, el exjuez español: «Estamos muy atentos a lo que está sucediendo y esperamos una explicación oficial que no afecte la libertad de expresión», dijo.
El Tribunal Supremo Electoral asegura no tener conocimiento de esta ocupación militar. «Es necesario que la comunicación fluja y los electores sepan que está sucediendo durante la jornada», dijo Garzón.
Ciap-Felap condena ocupación militar
La Comisión Investigadora de Atentados a Periodistas (Ciap) de la Federación Latinoamericana de Periodistas (Felap) ha exhortado a los periodistas y medios de América Latina y a la comunidad internacional a condenar el despliegue de fuerzas militares acaecido esta madrugada con la ocupación sorpresiva de las instalaciones, antenas y transmisores de Radio Globo, Globo TV y Canal 11 HonduRed, en el Cerro Cantagallo de Tegucigalpa.
La ocupación miltar de los transmisores constituye una amenaza a la libertad de expresión e información durante las elecciones que se desarrollan hoy para elegir presidente (a) de la República, 128 diputados y 298 alcaldes. La militarización no fue autorizada por el Tribunal Supremo Electoral, ni por la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), ni por ninguna civil de Honduras. En el Cerro Cantagallo existen numerosas instalaciones de antena y transmisores de muchos otros medios radioeléctricos, pero los únicos militarizados solamente fueron las de Radio Globo, Globo TV y Canal 11 HonduRed.
Un magistrado del Tribunal Supremo General argumentó que las transmisoras fueron ocupadas para “protegerlas”, pero ninguno de los medios pidió esa “protección”. Al contrario, reina preocupación y angustia entre los periodistas, trabajadores, ejecutivos y propietarios de esas estaciones a causa de la ocupación militar de antenas y transmisores.
Los temores de periodistas y medios están plenamente justificadas porque las instalaciones de Radio Globo y Globo TV fueron ocupadas y destruidas precisamente por fuerza militares durante el golpe cívico-militar que en 2009 derribó el gobierno constitucional de Manuel Zelaya y abrió paso a una cruenta dictadura.
Los comicios
Unos 5,4 millones de ciudadanos de Honduras, el segundo país más pobre de América Latina y el Caribe y uno de los más violentos del planeta, eligen hoy presidente (a), 128 diputados y 298 alcaldes en 5.437 centros de votación, en los 18 departamentos del país. La tasa de abstención normal es del 50%.
Para el reemplazo de Porfirio Lobo existen ocho aspirantes, encabezados por la izquierdista Xiomara Castro, de Libertad de Refundación (Libre), favorita, o en empate técnico, con el derechista Juan Orlando Hernández, del gobernante Partido Nacional (PN), según las encuestas.
Honduras ha sido gobernada más de medio siglo por militares, el PN y el Partido Liberal (PL, derecha) -tercero en los sondeos-, pero ésta es la primera vez que se miden la derecha y la izquierda. Abundan las denuncias de fraude, resurrección de electores muertos, decomiso de cédulas de identidad a partidarios de Castro antes de sufragar, uso de vehículos públicos en actividades de cohecho y propaganda, una campaña de “call centers” presionando para votar por el PN, entre muchos otros casos reportados por Radio Globo. Entre 800 observadores internacionales se encuentra el exjuez español Baltasar Garzón, quien expresó su preocupación por la ocupación militar de las antenas y transmisores de Globo Radio, Globo TV y Canal 11.
Honduras tiene 71% de sus 8,5 millones de habitantes en pobreza, mientras el subempleo alcanza el 40%. La economía presenta un déficit fiscal del 6% y una deuda pública desproporcionada. La violencia de pandillas y del narcotráfico alcanzaron el récord mundial de 85,5 homicidios por cada 100.000 habitantes. Desde el golpe militar de 2009 fueron asesinados 32 periodistas y comunicadores en Honduras –más un dudoso “suicidio”–, de un total de 36 abatidos desde 2003. En lo que va de 2013, han sido asesinados 3 periodistas en ese país centroamericano, según el recuento de Ciap-Felap.