La iraní Dorsa Derakhshani se muda a Estados Unidos
Una reciente revisión de la llamada teoría del stereotype threat, concepto de psicología social, sugiere que pudiera estar inflado este efecto en el caso de las mujeres en el ajedrez.
Este reciente estudio de campo realizado por el profesor Tom Stafford, del departamento de Psicología de la universidad de Sheffield, en el Reino Unido, examina el dominio de la presión sobre las mujeres, y qué aspecto es real en el juego del ajedrez.
La British Psychological Society a través de una página web ha hecho público este reciente estudio resumido en unos siete folios.
La llamada teoría del stereotype threat ocurre cuando un colectivo sufre un estereotipo negativo, la ansiedad experimentada para evitarlo o simplemente saber que existe, reduce sus capacidades intelectuales y aumenta las posibilidades de confirmar el citado estereotipo. En este caso sería que las mujeres son inferiores a los hombres en el ajedrez.
El miedo a enfrentarse a estereotipos hace que se conviertan en realidad, creando un gran efecto teórico pero de pequeño a mediano en el rendimiento práctico según este nuevo estudio.
En el ajedrez hay mucha información: bases de partidas y sistemas de clasificación que muestran al detalle, a priori, quién puede ser el ganador. Stafford exploró todo un conjunto de datos de jugadores con una edad de 32 años clasificados por la federación internacional, FIDE –que incluye a 150 000 hombres y 16 000 mujeres- y los resultados de más de cinco millones de partidas jugadas entre 2008 y 2015.
En su estudio partió de que el hombre tenía un promedio Elo de 2070 frente a la mujer que alcanzaba 1978, es decir las mujeres deben esforzarse para ganar a su rival ya que parten de una teórica inferioridad.
Hay que recordar qué significa el sistema de puntuación Elo -por su creador, Arpad Emrick Elo (1903-1992)-, adoptado en los años 70 del siglo XX que otorga una puntuación según el nivel de cada jugador. La mayoría de los jugadores profesionales o maestros reciben puntuaciones desde 2000 hasta 2400, y los mejores del mundo, todos los grandes maestros, superan los 2600 puntos. Los aficionados no superan los 1500. Una diferencia de unos 400 puntos entre jugadores sugiere que el jugador mejor puntuado tendrá bastantes posibilidades de ganar.
Los resultados muestran que las mujeres que partían de ese desafío se desempeñaron mejor frente a un hombre que frente a una mujer. Los resultados muestran lo opuesto a lo que hasta ahora figuraba como el concepto de amenaza de estereotipo.
Además, se estudiaron las condiciones de las jugadoras para ver si surgía la amenaza del estereotipo en las más jóvenes y con menos experiencia o jugadoras más mayores que se habían desenvuelto en condiciones sexistas o jugadoras en torneos donde son minoría. Nada cambió los datos, las mujeres jugaban mejor cuando lo hacían con hombres.
En partidas en que un jugador tenía 500 o más puntos Elo por encima del rival se descubrió que las mujeres con datos superiores perdieron en un 3,5 de los casos ante los varones pero al contrario, las féminas superaron a su rival masculino de mayor puntuación con un porcentaje mayor, un 3,7.
Otro dato señala que el efecto del estereotipo se produce cuando se desarrolla una actividad que no es habitual, pero este no es el caso porque las jugadoras deben haber jugado numerosísimas partidas para llegar a cierto nivel. Precisamente, mantiene que puede suceder una actitud masculina de subestimación hacia la mujer porque ataca a su ego el poder ser derrotado por una mujer.
Este estudio aclara que no quiere decir que no exista el estereotipo, pero sugiere que no es tan omnipresente o directo como algunos defienden. Como conclusión, se mantiene que en este tema complejo, los supuestos de género pueden no tener la misma influencia en todas las situaciones.
Hay que recordar que no es el primer estudio sobre los estereotipos, así en Padua, Italia se hizo un estudio en 2007 publicado en el European Journal of Social Psychology, sobre cómo afecta el género al ajedrez.
Entre sus consecuencias se indicaba que cuando una chica no sabía el sexo de su oponente o pensaba que era también una mujer ganaban la mitad de las partidas, cuando sabían que era un chico solo ganaban una de cada cuatro partidas.
La iraní Dorsa Derakhshani se muda a Estados Unidos
Por otra parte, el ajedrez femenino ha sido noticia por el cambio de Dorsa Derakhshani de Irán a Estados Unidos. Como se recordará, la ajedrecista, gran maestra desde 2016, tenía la prohibición desde febrero de este año 2017 de representar a su país natal por no llevar hiyab –pañuelo que cubre el pelo- en las competiciones internacionales en las que aparecía con la bandera de Irán.
Dorsa Derakhshani en el torneo de Gibraltar.
El anuncio se produjo tras el torneo Tradewise de Gibraltar (donde terminó 118 de un total de 225) y vino acompañado de la suspensión también de su hermano Borna, de 15 años, por haber jugado en un torneo internacional con un jugador de Israel, cuestión prohibida por el régimen iraní. Actualmente Borna reside en el Reino Unido. Sin embargo, no era la primera vez que Dorsa jugaba sin hiyab ya que lo habitual era que no lo luciera.
La ajedrecista era la primera jugadora sub-18 de Asia donde ganó el campeonato tres veces seguidas, de 2012 a 2014, y es actualmente la número 191 del mundo. Como curiosidad y con 19 años está acreditada como periodista por la FIDE.
Se da la circunstancia que Dorsa jugó en España, en concreto en el club Montcada, en Barcelona, hasta junio de este año, pero ahora se instaló definitivamente en San Luis, la meca del ajedrez estadounidense, donde estudia Biología en la Universidad y cuyo equipo de ajedrez representa. Así, se ha convertido en la primera deportista iraní que cambia su bandera por la de Estados Unidos por lo que su caso ha tenido una gran repercusión mediática en los medios americanos.
El presidente de la federación de ajedrez de Irán, Mehrdad Pahlevanzadeh, minimizó este traslado al afirmar que era algo usual entre ajedrecistas cambiar de federación nacional, cuestión que no deja de ser cierta y ese éxodo se incrementa en el caso de Estados Unidos.
[…] de Poltár, con cerca de seis mil habitantes, cerca de la frontera húngara. Cuenta con una calificación de 1100 puntos Elo y juega ya en liga de adultos. Ha ganado el campeonato de Eslovaquia en la categoría femenina […]