“Queremos” el nuevo partido de la niñez.
Para la política se ve que lo primero es la infancia, siempre y cuando le pida permiso a los negocios bancarios y a la moda de la esclavitud.
Negocios bancarios regentados por los banksters que campan a sus anchas gracias a una justicia de altura, o sea cuanto más alta la clase más justa. Hoy padecemos el gran negocio que nos endiñaron, o sea el de la deuda.
Está claro, el futuro es de los banksters, ladrones de guante blanco, terroristas financieros y demás canalla, mientras que la deuda es de las personas que aunque quieran ser y estar, se han propuesto esclavizarlas en el mejor de los casos.
Aunque contamos, eso sí, con un ministro de Justicia que defiende el derecho a la vida de las personas no nacidas, pero a partir del nacimiento no le importa dejarlas en manos de los exterminadores, igual es porque está tranquilo confiando en que el clero les hará un entierro divino.
Yo no sé ustedes, pero yo cada día vivo más en Babia, por salud claro…