Tras veinte ensayos probados en animales, científicos de la Universidad Nacional de Taiwan han desarrollado una tráquea en 3D que será trasplantada al primer paciente en menos de dos meses.
Este dispositivo impreso taiwanés, segrega medicamentos que fomentan el crecimiento celular y por ello, se espera combatir el rechazo; uno de los problemas más complicados de resolver en los trasplantes tradicionales, según apunta Chen Chin-Hsing, médico investigador.
Otra de las novedades que aporta esta cirugía es el uso de células madre que se insertarán a través de un brazo robótico y que se depositan en la tráquea artificial para poder producir cartílago y otros tejidos. Mediante esta nueva tecnología se espera que el trasplante de tráquea se solucione pronto desde que se decida la intervención pasando por el cultivo de las células madre del paciente.
Hay que resaltar que esta investigación cuenta con dos patentes ligadas al trasplante de tráquea cuyos resultados han sido publicados por el ministerio de ciencia y tecnología del país.
La tráquea es una parte del sistema respiratorio. Los órganos llevan oxígeno hasta los pulmones y sacan el dióxido de carbono fuera de ellos lo que permite inhalar aire que vaya desde la nariz a través de la laringe y luego pase por la tráquea. Existen diversos problemas asociados a la misma: el estrechamiento, la inflamación y otras patologías hereditarias que necesitan de una traqueotomía para que el paciente pueda respirar correctamente, sobre todo si tiene problemas de deglución o tose constantemente.