Scarlatti y Flamenco por Cañizares

El maestro de la guitarra Juan Manuel Cañizares ofreció el pasado 17 de julio en el Teatro Auditorio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid) el concierto Scarlatti & Flamenco, en el que pudimos disfrutar de su virtuosismo como intérprete, como compositor y como transcriptor de Sonatas de Scarlatti para guitarra.

Cañizares, Scarlatti & Flamenco.
17 de julio 2015, Teatro Auditorio de San Lorenzo de El Escorial

Seis sonatas, cada una seguida de un espacio de transición a una composición de Cañizares para guitarra flamenca. La sonata K208 se ensambla con la colombiana Como dos niños; la K 34 da transición a la guajira Mar Caribe; y así transcurren sucesivamente las sonatas K 40 con las bulerías El Abismo, del álbum Cuerdas del Alma, la K 32 con el zapateado Se alza la luna del álbum Noches de imán y luna, su primer disco como compositor solista; la K 11 con el vals Palomas y la K 291 con las alegrías Collar de perlas. 

Noventa minutos de concierto ininterrumpido, disfrutando en todo momento de la observación de sus manos prodigiosas, ya solo en toque, o acompañando a Charo Espino, bailarina/bailaora sevillana, maestra de elegancias, técnicas y sentires, internacional y premiada donde las haya, o a su pareja el bailaor Ángel Muñoz,  quien va por el mundo levantando pasiones, con esa forma de expresión que es la auténtica, la del cuerpo, el único que nunca engaña. Un trío de maestros en una mágica noche escurialense.

Fue el maestro Paco de Lucía  quien inició a Cañizares en el arte de la transcripción. Al principio de los años noventa, cuando le acompañaba en su gira por todo el mundo, le encargó la transcripción para guitarra de tres piezas de la Suite Iberia: El Puerto, Triana y El Albaicín. Ahí es donde se le abrió un campo infinito de posibilidades de investigación para la guitarra. Y de ahí nació la serie Por Cañizares, que hasta ahora ha producido seis discos: Original Transcriptions of Isaac Albéniz de 1999, un trabajo prodigioso de transcripción de sonatas de piano para dos guitarras, considerada como obra única por su valor intrínseco y por su valor histórico en la música española. Suite Iberia – Albéniz  por Cañizares, 2007; Goyescas – Granados por Cañizares, 2012. Y en 2014, con presentación en el Conde Duque, la Trilogía – Falla por Cañizares y las Sonatas de Scarlatti.

Cañizares – Scarlatti – primer flamenco. 17 julio 2015. Teatro Auditorio San Lorenzo de El Escorial

Scarlatti está considerado en algunos ámbitos como el primer compositor de flamenco de la historia. Como profesor de clave de la princesa portuguesa Bárbara de Braganza, cuando ésta se convirtió en reina de España como esposa de Fernando VI,  -segundo de los hijos de Felipe V que reinó en España – se trasladó a la corte madrileña que ya nunca dejó. Murió en Madrid con setenta y un años. En Madrid compuso las 555 sonatas para clavecín, muchas de ellas impregnadas de música hispano – árabe,  popular española y danzas españolas del siglo XVIII. Las Sonatas son la obra por la que Scarlatti es conocido en el mundo y las transcripciones de Cañizares para guitarra son por ahora las últimas, porque las Sonatas han sido transcritas, sobre todo a piano, en múltiples ocasiones.

Su estructura e invención es única en la historia de la música. Su excepcionalidad estriba en la investigación de todos los recursos y capacidades del clavecín, en su extraordinaria audacia armónica asociada a la música hispano – árabe. De esta audacia destaca la modulación  y enorme tensión que genera demorándose en las frases musicales sin resolver en la tónica, como ocurre en la sonata K 208, presente en el concierto de Cañizares y vinculada a la colombiana Como dos niños. También es notable la variedad rítmica y la riqueza de invención temática y estructural poseedora de una notable perfección, aparentemente enmascarada por su carácter popular  y su frescura y facilidad de escucha.

Las inflexiones poco acostumbradas en la técnica musical europea son síntomas de esta influencia, así como el gran número de acordes extremadamente disonantes y otras técnicas que parecen imitar el pulso de la guitarra flamenca.

También es rica en modismos folclóricos, a veces trágicos, que singularizan la estructura, así como en la variedad en la invención rítmica y melódica y la habilidad casi diabólica de su utilización en toda la amplitud de capacidades del clavecín. A primera vista, la escritura limpia y ordenada de las sonatas, puede hacer pensar en que su ejecución es relativamente sencilla. Nada más lejos de la realidad. La claridad de su pentagrama esconde terribles dificultades para el músico que las interpreta. Algunas contienen cambios de mano, saltos de octavas, complicados arpegios y escalas rapidísimas.

El ritmo de sus obras para teclado es de carácter vivo y variado, con la influencia constante de los aires populares de la música española. Ritmos que recorren  toda la longitud de la sonata con presencias tanto de guitarra flamenca como de percusión de castañuelas. Percusión de castañuelas que ha estado presente en el concierto Scarlatti & Flamenco de la sabia mano de Charo Espino.

El estudio de la relación entre las sonatas y el flamenco ha llevado a numerosos autores a encontrar en algunas de ellas un claro vínculo con jota, fandango, tonadilla, fado portugués, tango gaditano, saeta,  sevillanas, bolero mallorquín, bulerías, fandango portugués y petenera. Ahora vemos que Cañizares ha vinculado las seis sonatas incluidas en el concierto con composiciones suyas claramente anteriores a su trabajo de transcripción de las sonatas. Es decir, ha encontrado la relación con la colombiana, la guajira, las bulerías, el zapateado, el vals y las alegrías. Un trabajo de creación previo al de investigación para la transcripción.

Cañizares guitarra solista en el Concierto de Aranjuez. Dirección Sir Simon Rattle.

No viene mal recordar que Cañizares ha sido el primer y único guitarrista flamenco invitado por la Orquesta Filarmónica de Berlín, con quien interpretó en su Concierto Europeo el Concierto de Aranjuez, dirigido por Sir Simon Rattle en el Teatro Real de Madrid, en 2011.

Para finalizar, una previa. El lunes 20 de julio, en el marco de Veranos de la Villa, en la explanada de Puente del Rey, el espacio que ha sustituido a los Jardines de Sabatini del Palacio Real, tendrá lugar un concierto o quizá el concierto de este verano en Madrid. Cañizares y Carmen Linares presentarán un espectáculo que combina estilos flamencos, El amor brujo de Manuel de Falla, poemas de Juan Ramón Jiménez y Federico García Lorca. La intención es sintetizar un momento fundamental de la evolución del flamenco y la esencia andaluza.  Estarán acompañados por la Camerata Flamenco Project*, la bailaora Vanesa Aibar y el guitarrista Juan Carlos Gómez.

• Ver reseña Camerata Flamenco Project en Festival Suma Flamenca, Teatros de la Abadía. Madrid