Como viene siendo ya algo habitual sigue el aplazamiento del largo juicio al fotoperiodista egipcio Mahmoud Abu Zeid, conocido como Shawkan por los suyos, ahora se pospone al 7 de febrero de 2017, según ha determinado el Tribunal Penal de El Cairo.
Abou Zeid de 29 años supera más de 1240 días, casi tres años y medio, en prisión preventiva, una medida que viola la propia legislación egipcia, que recoge que no puede permanecer nadie más de dos años sin ser juzgado.
Su familia ha vuelto a apelar al fiscal para que lo deje en libertad por razones médicas pero se lo han negado. Hay que recordar que se le juzga en un macrojuicio con otras 700 personas. El joven no puede recibir en prisión los cuidados que necesita para tratar su hepatitis C. Está ingresado en la prisión de Tora de El Cairo.
El fotoperiodista egipcio se enfrenta a nueve cargos, una posible cadena perpetua o pena de muerte por acusaciones que incluyen el asesinato, el intento de asesinato, la pertenencia a un grupo ilegalizado, la participación en una manifestación ilegal y la posesión de armas.
Fue detenido con su cámara en la mano el 14 de agosto de 2013, mientras cubría la violenta dispersión de una manifestación en la plaza Rabaa al Adawiya, por parte de la policía tras el derrocamiento del entonces presidente, Mohamed Morsi. Era colaborador de las agencias Corbis y Demotix de Londres y sus fotografías habían aparecido en medios como The Sun, Time Magazine, Bild o Die Zeit.
En prisión, Shawkan ha recibido en 2016 dos premios en Estados Unidos, el Premio a la Libertad de Prensa John Aubuchon y también el Premio Internacional a la Libertad de Prensa del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ en sus siglas en inglés). Está apadrinado por la sección española de Reporteros sin Fronteras (RSF).
Amnistía Internacional reitera su petición de libertad antes del juicio y mantiene una campaña específica en estos días además de la permanente ‘Free Shawkan’ que ya ha recogido más de 120.000 firmas –en concreto, 120.042- para solicitar la liberación inmediata e incondicional, ya que es un preso de conciencia detenido exclusivamente por su trabajo de periodista.