Si le han detectado una tromboflebitis superficial, es posible que le hayan pedido una ecografía doppler y una resonancia para comprobar el estado de la enfermedad. Esta enfermedad que es benigna puede comprometer al paciente cuando se existe trombosis cerca de la unión safeno-femoral o safenopoplítea y entonces, deben acudir a un especialista vascular.
La tromboflebitis llamada también, trombosis venosa superficial, es una inflamación de las venas superficiales y está asociada con una trombosis venosa. Actualmente, los pacientes con tromboflebitis superficial limitada, por debajo de la rodilla, que no tengan evidencia de trombosis venosa profunda pueden ser atendidos en atención primaria y mediante antiinflamatorios no esteroides y compresión, podrán mejorar los síntomas.
Algunas veces puede afectar a los sistemas venosos y es importante porque puede asociarse de igual forma a una embolia pulmonar. Inicialmente el tratamiento es sintomático y hay que evitar las complicaciones derivadas de esta enfermedad porque pueden ser potencialmente mortales.
La enfermedad se presenta con dolor y decoloración (enrojecimiento en fase aguda) sobre las venas superficiales y la vena, a la palpación está dura y es muy sensible. Si existiera una hinchazón en la extremidad se podría sospecha que es profunda.
Si existiera fiebre, inflamación o secreción de pus debe acudir a un servicio de emergencias de inmediato.
La inmovilidad prolongada, el estado de hipercoagulabilidad o el trauma en la pared del vaso pueden predisponer a padecerla. Los tratamietos son diversos y todos dependen de la modalidad y pueden pasar desde diversas formulaciones de heparina, medicamentos antiinflamatorios, anticoagulantes etc. Las medias de compresión graduada que deben ser recomendadas por el médico, ayudarán también a mejorar el flujo venoso así como mantener actividad diaria moderada, las pomadas para el retorno venoso y mantener las piernas en alto son consejos que puede poner en práctica rápidamente.
En cualquier caso, si es derivado a un cirujano vascular, a un angiólogo o a un hematólogo es porque precisa una intervención de un especialista que le permita ganar en calidad de vida. Siempre en cualquier caso, debe comentarle su historia médica y las enfermedades crónicas que padece o ha padecido.