Un tribunal de Estambul ha sentenciado, el 25 de diciembre de 2017, que continúen en detención preventiva cuatro trabajadores del diario Cumhuriyet, periódico de oposición tradicionalmente muy crítico con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Se trata del dueño de la publicación, Akin Talay, el redactor jefe, Murat Sabuncu, el periodista de investigación Ajhmet Sik, quien lleva trescientos sesenta días tras los barrotes, y el contable, Emre Iper.
En este proceso, que se está prolongando ya varios meses y tendrá una próxima vista el 9 de marzo de 2018, con la particularidad de que se celebrará en la cárcel de Silivri, al oeste de Estambul, según ha anunciado el abogado de la defensa, se juzga a diecisiete dirigentes, periodistas y otros trabajadores de Cumhuriyet, por “actividades terroristas, que pueden ser condenados hasta 43 años de cárcel. Los trabajadores de Cumhuriyet rechazan las acusaciones y denuncian que el objetivo del juicio es silenciar uno de los últimos periódicos independientes del país.
En la vista del día 25, el presidente del tribunal, Abdurrahman Orkun Dag, ordenó la expulsión de la sala del periodista Ahmet Sik por hacer “una defensa política”, acusando al gobierno de “tratar como terroristas a quienes no lo son”, y a la justicia de “estar controlada por el poder” y hacer “acusaciones absurdas”.
Según la página web P24, especializada en la libertad de prensa, en Turquía hay actualmente 160 periodistas detenidos.