El prefijo anti-, como todos los prefijos, se escribe por regla general unido a la palabra a la que precede sin guión, señala la Fundéu.
En los medios de comunicación pueden encontrarse frases como las siguientes: «Aceptará la instalación de un escudo anti-misiles en su territorio», «El organismo centraliza en Perú la lucha anti-droga» o «Unas 700 personas participaron en la manifestación anti-nuclear».
Sin embargo, como señala la última Ortografía académica, los prefijos se unen a la palabra a la que preceden sin guion, de modo que en los ejemplos anteriores debió escribirse «antimisiles», «antidroga» y «antinuclear».
En cambio, sí se utiliza el guion cuando el prefijo se une a una palabra que empieza con mayúscula (en general un nombre propio) o a una sigla: anti-PP, anti-Carmena, anti-OTAN.
Se recuerda asimismo que al terminar este prefijo con una vocal, si el segundo elemento empieza con erre, es necesario duplicarla para mantener su sonido fuerte: antirrecesión, antirrobo, antirretroviral.
Por otra parte, cuando anti- se une a una palabra que empieza por i-, es preferible simplificar la grafía -ii- (siempre y cuando esa simplificación no cree confusión o se pronuncien claramente las dos vocales): antincendios, antinflamatorio, antimperialista.
Me gusta más la pronunciacion con las dos iis : antiincendios, etc.