La dureza del patriarcado neoliberal.
El machismo desconoce la amplitud de la afectividad debido a la hombría del sistema neoliberalisto, sobre todo en su parte sensible, (esa que se deja llevar por sentimientos como la compasión, la ternura y el amor, permitiéndose sentir emoción y dolor con facilidad) ¿cuántas veces hemos escuchado: ¡los niños no lloran!? ¿Y cuántas: ¡no seas cobardica, gallina!?
En dicho «sistema del macho», lo normal es asociar la hombría a dureza afectiva, como en el primer caso, y en el caso de la cobardía, a la propia falta de virilidad. Mucus nos va a dar cuenta de cómo los sentimientos encadenados al “machorrol” de género, son la mejor manera de empatizar en la Luna, con todo lo que tiene vida en la Tierra…
Mucus aclara sobre este machosistema que:
- Persigue la igualdad, pero de clases: los hombres son iguales y las mujeres son iguales, pero juntos no.
- A los varones les reprime los sentimientos de miedo y tristeza, y les refuerza en la agresividad.
- A las mujeres al revés, las reprime en agresividad y las refuerza en miedo y tristeza.
- Por tanto se equivoca de pleno, los sentimientos están para adaptarnos a nuestras circunstancias y son necesarios para vivir en armonía.
- Además es capaz de justificar la tortura a los animales (como a los toros en España, “Toro de la Vega”), uniéndola a conceptos como: cultura, libertades y tradición, cuando es una salvajada.
- Como considera que la Tierra está en sus manos y el mundo pertenece a los hombres (y cuanto más pod€ro$o$ más, a quienes hay que obedecer), y lo que en ella habita también, así van las migraciones, las poblaciones que piden asilo, la cantidad de árboles, la contaminación, el clima y su cambio…
- De tal manera que tanta hombría rebosa en agresividad, gracias al sistema del macho insensible, que en su poderío solo se permite sentir agresividad y violencia, con tal de no parecer la mujer que identifica como tal, a la que concibió subordinada e inferior a él.
- Esta es la culturO huevolucionada tradicionalmente conservadora, y hoy particularmente lista, neoliberalista.
Así las cosas, Mucus esputa:
- la mayor proeza del Homo Monstruosus es que es capaz de hacer hasta lo imposible por empatizar con su propio ombligo y alrededores, para mí que en la cadena evolutiva no se perdió un eslabón, se perdió un gran tornillo ¡y muy gordo!
- Pero podemos decir a pesar de todo que:
- Las mujeres que defienden su libertad no conformándose a los roles asignados por el sistema machista, sintiendo empatía por las mujeres, puesto que son las utilizadas por el mismo para su beneficio, al son de “divide y vencerás”… son las auténticas estrellas.
- Los hombres que sienten empatía de verdad por las mujeres, por los hombres sensibles, por los animales, la naturaleza,… la vida y se defienden del machorrol son los auténticos héroes.
https://youtu.be/-aWIfm1BiHY
[…] de verdad, puede de verdad. Hace siglos que sobran escusas y falta sensibilidad. Al parecer es el “machodinero” y no el amor, el que todo lo […]