La Fundéu indica que los términos antiopa y contraopa, formados a partir de la sigla lexicalizada opa y los prefijos anti- y contra-, son perfectamente apropiados.
En las noticias económicas de los medios de comunicación es frecuente encontrar frases como las siguientes: «A vueltas con los blindajes anti-opa», «La licitud de las medidas anti OPA en Estados Unidos», «Nasdaq estudia lanzar una contra OPA sobre la Bolsa de Nueva York», «Constellation estudia presentar una contra opa por Allied Domecq».
Sin embargo, opa es una sigla ya lexicalizada (igual que ovni y sida, por ejemplo) y así se recoge en el Diccionario académico. Se trata, por tanto, de un nombre común que se escribe en redonda y con minúsculas. Como tal, puede formar palabras derivadas uniéndose a prefijos como contra- y anti-. Y estos prefijos, como todos en español, se unen a la palabra sin espacio ni guion: contraopa, antiopa.
En los ejemplos anteriores, por tanto, lo adecuado habría sido escribir «A vueltas con los blindajes antiopa», «La licitud de las medidas antiopa en Estados Unidos», «Nasdaq estudia lanzar una contraopa sobre la Bolsa de Nueva York» y «Constellation estudia presentar una contraopa por Allied Domecq».