La Federación Asiática de Ajedrez (ACF) ha aprobado en su Asamblea general, celebrada en Abu Dabi, el ingreso de la Federación de Ajedrez de Rusia (CFR), petición efectuada como consecuencia de la guerra en Ucrania. Es la primera federación deportiva rusa que pasa de Europa a Asia.
De un total de 36 delegados asiáticos reunidos en Abu Dabi, veintinueve votaron a favor, uno en contra (Papúa Nueva Guinea) y seis se abstuvieron (Mongolia, Taiwan, Hong Kong, Singapur, Australia y Bután). Los miembros federados eran 54 países, incluidos algunos muy destacados en la práctica del más que milenario juego como India, China, Kazajistán y Uzbekistán.
«Este es un gran éxito para nuestro deporte. Somos la primera federación deportiva que ingresa en la familia asiática», declaró el presidente de la CFR, Andréi Filátov.
La transición se llevará a cabo a partir del 1 de mayo, tras haberla iniciado en abril de 2022. «Ha ocurrido un hecho histórico», subrayó Filátov, quien dio las gracias a los países asiáticos y confió en la celebración en territorio ruso de grandes torneos. El presidente de la Federación Asiática de Ajedrez, el sultán Ibn Khalifa Al Nahyan, les dio la bienvenida.
Al respecto, el ministro de Deportes ruso, Oleg Matitsin, consideró que la decisión había sido «positiva» ya que, argumentó, la prioridad es que los ajedrecistas puedan competir a nivel internacional. «Los maestros rusos también tienen algo que ofrecer a nivel competitivo», a la vez que felicitaba a la federación por este cambio.
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, aseguró este martes que el «giro a Asia» no se puede aplicar de manera general al deporte ruso, sino analizar cada caso por separado: «Es importante destacar que la federación asiática reúne a los países con el mayor nivel de ajedrez, con el mayor número de maestros del mundo».
La transición también recibió el beneplácito de la Federación Internacional (FIDE), cuyo presidente, el ruso Arkadi Dvorkóvich, destacó que esa decisión permitirá a los maestros rusos competir «más libremente (…) en un tiempo tan difícil como el que estamos viviendo. Ha sido una decisión conjunta. Somos una familia ajedrecística. Confiamos en que al final toda la familia esté bien», subrayó.
No obstante, los ajedrecistas rusos disputarán desde este jueves 2 al 14 de marzo el campeonato de Europa, a celebrar en Vrnjacka Banja, Serbia, ya que el ingreso en Asia no se consumará hasta el 1 de mayo, cuando Rusia formará parte de la zona 3.8 asiática.
En este torneo jugarán ajedrecistas rusos, unos partidarios de Putin como el joven Volodir Murzin de dieciséis años y otros críticos como Andrei Esipenko, quien actualmente juega en Dusseldorf y ha residido en España, como Nikita Vitiugov y Vladimir Fedoseev.
Recientemente, la Unión Europea de Ajedrez (ECU) anunció que podrán elegir otra federación europea hasta el 1 de agosto sin pagar las tasas de transferencia, pero deben cumplir con los trámites de residencia en el país de la nueva asociación.
Además, rusos y bielorrusos podrán participar en torneos internacionales bajo la bandera de FIDE hasta el 1 de enero de 2024 como ha sucedido desde el inicio de la invasión de Ucrania. Debido al inicio de la guerra, hace un año la FIDE prohibió a los equipos nacionales de Rusia y Bielorrusia participar en torneos con licencias de sus respectivas federaciones.
Rusia cuenta con 190 grandes maestros que ahora deberán elegir donde quedarse y a quién representar. Desde Ucrania se ha criticado que los jugadores rusos que ahora cambien de bandera puedan luego volver, teóricamente, a su federación. También que en el pasado Campeonato Mundial de Rápidas y Relámpago de Kazajistán pudieron participar sin trabas los jugadores rusos mientras que los ucranianos apenas pudieran desplazarse por los numerosos problemas que les suponía.
El 27 de febrero, tres días después de que comenzara la intervención militar rusa, el gran maestro y candidato a la corona mundial en 2016, Sergei Karjakin, publicó una carta abierta en la que apoyaba la «operación militar especial».
Mientras la FIDE le suspendió de todas las competiciones durante seis meses, el presidente ruso, Vladímir Putin, le galardonó en junio de 2022 con la Orden al Mérito ante la Patria de segundo grado.
Actualmente Karjakin se convirtió en presidente de la región de Moscú de ajedrez, a la vez que salió de la lista de los cien primeros de la lista de ajedrecistas de FIDE ya que no disputó ningún torneo oficial, aunque sí extraoficiales celebrados en Moscú, por lo que, según las normas, se le considera inactivo.
La ECU calificó de «día vergonzoso» lo ocurrido. Su vicepresidente y experto en ajedrez educativo, el británico Malcolm Pein, señaló además que el ajedrez es el primer deporte donde Rusia evade las sanciones internacionales, además de que FIDE «está claramente fuera de la sintonía internacional y la organización es un juguete de un poder blando donde los movimientos son dirigidos por el Kremlin» (en alusión a la presidencia del ruso Arkady Dvorkovich).
