La Fundéu indica que la expresión inglesa off the record, que se emplea en el lenguaje periodístico para referirse a los comentarios que se hacen de modo confidencial o extraoficial y que no deben divulgarse, puede sustituirse en español por fórmulas como confidencial o a micrófono cerrado.
El Diccionario panhispánico de dudas señala que off the record se usa como locución adverbial o adjetiva y ofrece como alternativas las expresiones españolas confidencial(mente) —que es la traducción que propone el diccionario de Cambridge—, extraoficial(mente) y a micrófono cerrado, entre otras.
Se emplea a menudo como sustantivo para referirse al acuerdo de no usar esas declaraciones («Se saltó el off the record y publicó lo que habían hablado»), en cuyo caso es posible sustituirlo por acuerdo o pacto de confidencialidad o, en ciertos contextos, simplemente por confidencialidad.
También es frecuente su empleo como sustantivo para aludir a las declaraciones mismas («Mostró su malestar por la publicación del off the record») y entonces pueden emplearse expresiones como declaraciones confidenciales, extraoficiales, a micrófono cerrado…
En todo caso, si se prefiere usar el anglicismo, lo adecuado es escribirlo en cursiva (o entrecomillado si no se dispone de ese tipo de letra), con dos efes (no of the record) y sin tilde, ya que se está usando el extranjerismo crudo record y no su adaptación al español récord.
Uso no recomendado
- Independientemente del contenido de la conversación off the record, su filtración pone de manifiesto el peligro de muerte que vive el oficio de periodista.
- La mayoría de las confesiones de los políticos en el acto eran off the record y de corto recorrido.
- Saltarse un off the record va contra la decencia profesional.
Uso recomendado
- Independientemente del contenido de la conversación confidencial, su filtración pone de manifiesto el peligro de muerte que vive el oficio de periodista.
- La mayoría de las confesiones de los políticos en el acto eran a micrófono cerrado y de corto recorrido.
- Saltarse un pacto de confidencialidad va contra la decencia profesional