El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) ha emitido un comunicado sobre violaciones a la libertad de prensa en Guinea Ecuatorial, faltando poco para celebrarse un simposio sobre inversión, programado para principios de febrero.
El 20 de enero en Malabo, capital de Guinea Ecuatorial, agentes de seguridad armados arrestaron a Javier Blas, redactor sobre África para el Financial Times, y a Peter Chapman, redactor sénior del periódico, dijo Blas al CPJ.
En el momento del arresto, los periodistas se dirigían en un taxi a una entrevista con un ministro. Fueron trasladados al Ministerio de Seguridad Nacional, donde se les confiscaron los equipos, y luego de tres horas fueron liberados, contó Blas. Las autoridades les devolvieron a los periodistas sus respectivos pasaportes y teléfonos móviles después de siete horas, pero rehusaron a devolverles las computadoras portátiles, libretas de apuntes, y grabadora digital, que contienen entrevistas con diplomáticos y políticos locales.
Blas, de nacionalidad española, y Chapman, británico, entraron al país el 14 de enero, después de obtener una visa por 30 días en la Embajada de Guinea Ecuatorial en Londres, para dar cobertura al período previo a una conferencia sobre inversión a celebrarse a principios de febrero, dijo Roula Khalaf, corresponsal extranjero para el Financial Times. Guinea Ecuatorial está trayendo a expertos e inversores de todo el mundo para presentar las oportunidades de diversificación de la economía del país.
«El arresto de Javier Blas y de Peter Chapman y la confiscación de sus equipos es una advertencia para todos los periodistas y sus potenciales fuentes de que el intercambio de información tiene graves consecuencias en Guinea Ecuatorial,» expresó Peter Nkanga, consultor del CPJ sobre África Occidental: «La autoridades deben devolver los equipos de reportaje a Blas y Chapman y abstenerse de acosar a los periodistas que buscan la cobertura de la conferencia de febrero».
Blas le dijo al CPJ que a ambos se les negó la comunicación con sus respectivos consulados locales durante su detención, lo que es una violación a lo establecido por la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares.
Khalaf dijo que a los periodistas se les entregaron las credenciales de prensa otorgadas por el ministro de Información, Teobaldo Nchaso Matomba. Blas dijo al CPJ que cuando estaban en custodia, un oficial de policía les dijo que los habían estado observando durante varias horas. Añadió que uno de sus entrevistados les había alertado que no mantuvieran conversaciones confidenciales por teléfono, ya que estaban siendo observados.
Khalaf agregó que los periodistas salieron de Guinea Ecuatorial el 21 de enero, y que se los dejó partir solo cuando revelaron a las autoridades las claves de acceso de las computadoras portátiles. Los periodistas retornaron a Londres sin sus computadoras portátiles, libretas de notas y grabadora digital.
Matomba dijo al CPJ por teléfono que atendería a las solicitudes de comentarios por correo electrónico. Sin embargo, no lo hizo inmediatamente.
¿Cómo puede ser que los periodistas de un diario tan importante sean tan inútiles que no envíen los materiales por Internet, de manera cifrada?