En el mayor golpe asestado por la Ley de Seguridad Nacional a la oposición de Hong Kong, este miércoles 6 de enero de 2021 la policía de la región semiautónoma ha detenido a cincuenta y tres conocidas figuras enfrentadas al gobierno autoritario de Pekín.
La operación ha sido llevada a cabo por un millar de miembros de las fuerzas del orden que han efectuado setenta y dos registros domiciliarios, entre otros en un gabinete de abogados, un instituto de sondeos y los medios de comunicación Apple, Daily, Stand News e Inmediahk.
La Ley de Seguridad Nacional entró en vigor a finales de junio 2020, como respuesta del Partido Comunista Chino a las masivas manifestaciones prodemocracia de 2019.
En la operación han detenido a exparlamentarios demócratas como James To, Andrew Wan y Lam Cheuk Ting, y también a militantes más jóvenes, según la información de las agencias internacionales, dos de los cuales han confirmado su arresto por Facebook: se trata de Gwyneth Ho, experiodista de treinta años y Tiffany Yuen, de veintisiete años.
Según algunas fuentes, también se encuentra detenido el abogado estadounidense John Clancey, quien trabaja en un gabinete comprometido en la defensa de los derechos humanos.
Algunas personalidades de la oposición han declarado a los corresponsales extranjeros que las detenciones están relacionadas con la organización de unas primarias en los partidos prodemocracia a finales del año pasado, en las que votaron más de medio millón de hongkoneses que pretendían elegir candidatos para las próximas legislativas en el territorio que hoy cuenta con una Asamblea de setenta miembros, de los que solo la mitad han sido elegidos por la población.
Desde el gobierno de Pekín habían advertido que hacer campaña para intentar conseguir una mayoría era un acto de «subversión», de acuerdo con la nueva Ley de Seguridad Nacional, que puede castigar esos «delitos» con una pena de hasta cadena perpetua.