Quería ser tenue esperanza de fronteras desdibujadas, sílaba átona que pasara desapercibida en el tren de la palabra, consonante muda ad-herida al discurso no pronunciado todavía pero que ya sangra.
Quería un horizonte sin cúmulos nubosos ni estratos en la atmósfera social; poder sostenerse a la vida por el pecíolo del empecinamiento tenaz que nutriera sus folios sin necesidad de parte y número.
Quería que el des-aliento se fuera al diablo y así poder seguir seduciendo a los ángeles en vertiginosa caída de un poema libre mientras el mástil de lo políticamente correcto se fracturara ante sus requiebros.
Quería que el amor no tuviese barandas ni señales de tránsito por lo que pudiera circular libremente a cielo abierto, a campo traviesa, sin necesidad de activar el Global Positioning System sino que sólo fuese guiado por un pálpito.
Quería un sueño no victimizado por el plan operativo anual, poder tener la metáfora como método y las palabras como fin en sí, sin baremos ni indicadores de resultado, sin adendum ni formato de requerimientos.
Quería la justicia en tiempo real sin representación a escala ni maqueta de lo que nunca será, desplegar su parapente y volar en equidad con las aves de buen agüero rumbo a la noche estrellada y sin espantos.
Quería que la felicidad se quedara a vivir junto suyo y no estuviese siempre montando y levantando campamentos con las bolsas negras que contendrán luego los anhelos descompuestos y alegrías desechadas.
Quería un álbum de fotografías del futuro próximo para prevenir con tiempo el alzheimer de las causas nobles, un puñal afilado como para descascarar mandarinas y un fuego cruzado de piropos desahuciados.
Quería que su pregunta no se estrellara en el infinito, que le narraran cuentos para despertar y que el reloj no le pusiera cadenas a la hora del encuentro amistoso frente a la ventana del deseo erótico.
Pero, entonces, llegó la duda y mandó todo al carajo. Y el querer se quedó solo con ella sola.
Autores:
- Palabra: Ileana Ruiz
- Ilustración: Xulio Formoso
Una vez más el dúo Ileana-Xulio, me sorprenden!!!!!. Un dibujo y un texto que te llevan a pensar , a sentir , a indentificarse, a encontrar en las palabras vivencias que marcan rumbos y sentimientos . A veces somos aves frágiles e inocentes enfrentadas a aves de rapiña que sólo van tras su presa tratando de dominarla. A veces en la vida nos toca volar aunque en ese vuelo llevamos las alas algo pesadas por vivencias, por miedos, por sentimientos, decepciones , rabias y hay que aligerar las cargas para volar mejor y más lejos…! Allí donde el horizonte se pinta de naranja y el infinito te devuelve una sonrisa . Hermoso dibujo y un texto que te lleva a un GPS que sólo el sentimiento puede ubicar. Gracias Ileana, gracias Xulio…!