La escultora Alicia Martín premio Antonio de Sancha de los Editores de Madrid

La escultora Alicia Martín ha recibido el Premio Antonio de Sancha 2019, que le ha concedido la Asociación de Editores de Madrid (AEM), “por su valoración del libro como elemento artístico, resaltando sus valores simbólicos y de comunicación; y vaso comunicante entre la edición, la lectura y la escultura”, ha informado Manuel González, presidente de la asociación.

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Alicia Martín y Manuel González, presidente de la Asociación de Editores de Madrid (AEM) en la presentación del Premio Antonio de Sancha 2019

Alicia Martín ha agradecido este galardón “por reconocer la figura del artista” y ha explicado que el planteamiento de sus trabajos con los libros «no parte de la idea de Libro de artista sino del libro como artefacto simbólico» y que los distintos proyectos de escultura realizados en la calle interpelan a la ciudadanía con la intención es provocar un impacto seco que no deje indiferente».

«Una masa de libros desordenados cuyo soporte es la fachada de un edificio interrumpe el espacio público señalando un lugar concreto. Es una ocupación efímera, que marca el ritmo vital en el que la erosión del material y las condiciones naturales del medio forman parte de la propuesta. La escultura es el recuerdo que queda de ella, un recuerdo individual, personal y subjetivo”.

Alicia-Martín-Biografías-2003 La escultora Alicia Martín premio Antonio de Sancha de los Editores de Madrid
Alicia Martín, Biografías 2003, Casa de América, Plaza de Cibeles, Madrid

Para Manuel González, presidente de la Asociación de Editores de Madrid, “la obra de Alicia tiene un carácter absolutamente innovador y también provocador. Da un inmenso valor al libro, le dota de una carga simbólica que nos lleva a reflexionar sobre la multiplicidad de su utilización”.

“Lejos de escandalizarnos, los editores reconocemos la nueva vida que Alicia da a las copias de libros, a materiales que estaban destinados a la desaparición, para convertirlas en elementos dentro de una composición artística genuina, singular y exclusiva”, ha asegurado González. “Al reutilizar el objeto libro-papel e incluirlo en la escultura y en la arquitectura, su obra nos obliga a tener una mirada nueva sobre el propio libro, a establecer un diálogo diferente”.

La entrega del Premio tendrá lugar el próximo 27 de noviembre en el Auditorio del Museo Lázaro Galdiano: “para nosotros, el Antonio de Sancha es nuestro “día grande”, ha explicado Manuel González. “Es el día en el que el sector de la edición tiene protagonismo, y en el que insistimos en trasladar a las diferentes administraciones la necesidad de apoyar la lectura y el libro; y lo seguiremos recordando hasta que este país tenga los mismos índices de lectura y comprensión lectora que otras naciones como Canadá, Finlandia o Corea del Sur”.

El Premio Antonio de Sancha se otorga anualmente a personalidades que se han distinguido por su labor en defensa de la cultura en general, y del libro y la lectura en particular.

Entre los anteriores galardonados se encuentran el premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, la catedrática de Ética Adela Cortina, el dibujante Antonio Fraguas “Forges”, el escritor Amin Maalouf, el político colombiano Sergio Fajardo, el escritor y filósofo Fernando Savater, el expresidente de Uruguay Julio María Sanguinetti o el ex director general de la Unesco Federico Mayor Zaragoza.

Alicia-Martin-Contrapposto-2019 La escultora Alicia Martín premio Antonio de Sancha de los Editores de Madrid
Alicia Martin Contrapposto 2019

Alicia Martín

Alicia Martín (Madrid, 1964) es una creadora que trabaja en diferentes disciplinas: escultura, fotografía, dibujo, vídeo y las grandes instalaciones, por las que es más conocida y ha obtenido un mayor reconocimiento. Comenzó a trabajar con libros en los años 90, convirtiéndolos en una de sus señas de identidad.

Su obra más conocida es Biografías, un torrente de libros que ha “asaltado” el espacio público cayendo desde las ventanas del Palacio de Linares en Madrid, la librería Gandhi en México o el Museo Meermanno en la Haya. Suyas son las esculturas Palíndromo, realizada en 2017 en el Da2 de Salamanca, Vórtice, en el Centro de Arte de Alcobendas), la exposición Archivo 113 para el Museo Lázaro Galdiano o la reciente Contrapposto para el espacio de El País en ARCO 2019. Ha expuesto, además, en Museos y Galerías de España, Italia, Francia, Rusia, Japón (colectiva), Colombia o Estados Unidos, entre otros.
Historia del Premio.

Premio Antonio de Sancha

En 1997, la Asociación de Editores de Madrid decidió crear un premio de carácter universal que otorga anualmente a una personalidad por su papel destacado en la promoción y defensa de la cultura, del libro y de la lectura.

La denominación oficial del galardón es Premio Antonio de Sancha, en honor al primer editor español. Después de trabajar como librero, encuadernador e impresor, Antonio de Sancha (1720-1790) se convirtió en editor para, como él mismo escribió, “reimprimir las mejores obras que se han escrito que, por raras, apenas son conocidas”.

Su contribución a la cultura española ha sido extraordinaria, ya que se atrevió a editar obras que permanecían inéditas al cabo de tres siglos de invención de la imprenta como El Poema del Mío Cid, el Libro del Buen Amor o las poesías de Gonzalo de Berceo.

Asociación de Editores de Madrid

La Asociación de Editores de Madrid (AEM) es una asociación profesional formada por cerca de trescientas editoriales privadas de toda España, que en 2018 facturaron 982 millones de euros, lo que supone el 42,2 % del total de la industria editorial española.

Desde hace más de veinte años, la AEM otorga el Premio Antonio de Sancha y organiza las campañas de fomento de la lectura Libros a la Calle, en colaboración con la Comunidad de Madrid y sus transportes públicos, y el Concurso Escolar de Lectura con la participación de los colegios de la Comunidad de Madrid.

Nunci de León
Doctor en Filología por la Complutense, me licencié en la Universidad de Oviedo, donde profesores como Alarcos, Clavería, Caso o Cachero me marcaron más de lo que entonces pensé. Inolvidables fueron los que antes tuve en el antiguo Instituto Femenino "Juan del Enzina" de León: siempre que cruzo la Plaza de Santo Martino me vuelven los recuerdos. Pero sobre todos ellos está Angelines Herrero, mi maestra de primaria, que se fijó en mí con devoción. Tengo buen oído para los idiomas y para la música, también para la escritura, de ahí que a veces me guíe más por el sonido que por el significado de las palabras. Mi director de tesis fue Álvaro Porto Dapena, a quien debo el sentido del orden que yo pueda tener al estructurar un texto. Escribir me cuesta y me pone en forma, en tanto que leer a los maestros me incita a afilar mi estilo. Me van los clásicos, los románticos y los barrocos. Y de la Edad Media, hasta la Inquisición.

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