300 noches son las que lleva la Plataforma Pro-Soterramiento de las vías del AVE a su llegada a la ciudad de Murcia. 300 jornadas en las que exigen que la nueva infraestructura no parta en dos la ciudad y que sea cumplido lo que Zapatero les prometió en 2006 que no es otra cosa que enterrar las vías.
Mantienen la esperanza por el nuevo gobierno aunque aseguran que no van a dejar de manifestarse cada día. Batallas campales, multas por manifestarse impuestas por el anterior gobierno y situaciones del todo incómodas hacen que su lucha no sea en vano. A favor tienen a la Unión Europea que a pesar de ello, les reprenden que no hayan hecho en tiempo y forma una declaración de impacto ambiental.
El Barrio de Santiago el Mayor se llena de personas que gritan cada día para que ADIF pare las obras dado que continúan las obras conforme a la planificación prevista; conecta Murcia a la red de alta velocidad (AVE). Existe cierta normalidad desde que ha entrado el nuevo delegado del gobierno que asegura que hay estabilidad, normalidad, escucha y cercanía con las personas.
La plataforma exige al gobierno que ADIF desmonte las catenarias que se han instalado en la superficie y que el tren llegue a la ciudad soterrado. Piden además valorar y analizar las actuales infraestructuras y aseguran que es voluntad del ministro y el nuevo secretario de Estado que es murciano, Pedro Saura, acelerar las dos fases de licitación de las obras de soterramiento.
La Plataforma cree en las promesas del nuevo gobierno y considera que la reactivación de la variante de Camarillas, así como la mejora de cercanías, Alicante-Murcia-Lorca beneficiarán a los habitantes que hoy están abandonados.