El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Husein, criticó duramente este lunes 20 de abril las políticas migratorias «cínicas» de la Unión Europea, acusando a Bruselas de arriesgarse a transformar el Mediterráneo en un «vasto cementerio», informa Andes.
Por su parte, el Consejo Europeo anunció que el jueves se celebrará en Bruselas una cumbre extraordinaria para tratar el tema.
«Europa da la espalda a algunos de los emigrantes más vulnerables del mundo y se arriesga a transformar el Mediterráneo en un vasto cementerio», declaró Zeid en un comunicado emitido tras los últimos naufragios que se han producido frente a las costas europeas y que podrían sumar más de un millar de muertos.
El balance oficial del último hundimiento, acaecido el domingo, es de 24 muertos y 28 rescatados, pero la cifra de víctimas mortales podría ser considerablemente más alta: según los supervivientes, a bordo del barco viajaban por lo menos 700 personas. Este lunes, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informó que otro barco con unas 300 personas se estaba hundiendo en el Mediterráneo.
Zeid exhortó a los gobiernos de los países de la UE a adoptar «un enfoque más valiente y menos cínico», acusándolos de ceder ante los movimientos populistas xenófobos en ascenso en el espacio comunitario.
El alto responsable de Naciones Unidas consideró que la operación europea de vigilancia marítima Tritón no se adaptaba a la situación actual, por estar «antes destinada a controlar las fronteras marítimas que a salvar vidas».
Reunión extraordinaria en Europa
El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, anunció este lunes 20 que el jueves 23 se celebrará en Bruselas una cumbre extraordinaria sobre el drama de los migrantes en el Mediterráneo, tras la muerte de cientos de personas en recientes naufragios.
«He decidido convocar una cumbre europea extraordinaria este jueves sobre la situación en el Mediterráneo», anunció Tusk en su cuenta de Twitter.
La reunión había sido pedida el domingo por el jefe del gobierno italiano, Matteo Renzi, y apoyada por varios de sus homólogos, entre ellos el presidente del gobierno español Mariano Rajoy y el primer ministro británico David Cameron.
«No podemos continuar así, no podemos aceptar que cientos de personas mueran tratando de cruzar el mar para venir a Europa», subrayó Tusk en un mensaje de video.
Enumeró «algunos de los temas a abordar en forma urgente: cómo detener a los traficantes de seres humanos, cómo aumentar nuestros esfuerzos conjuntos para salvar a la gente necesitada, cómo ayudar mejor a los Estados miembros más afectados y cómo aumentar nuestra cooperación con los países de origen y de tránsito».
Miles de migrantes africanos huyen de sus países, principalmente a causa de la violencia, y escapan en arriesgadas travesías cruzando el Mediterráneo con destino a Europa.
Mientras tanto, este lunes la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) anunció que un navío con más de 300 pasajeros se estaba hundiendo en el Mediterráneo.
La organización dijo que recibió una llamada de auxilio de una persona que viajaba a bordo y que afirmó que murieron 20 personas.
«La persona que llamó dijo que hay más de 300 personas a bordo de su barco y que se está hundiendo. (También) afirmó que había muertos, al menos 20», indicó la organización con sede en Ginebra.
La organización contactó a las guardias costeras del Mediterráneo, pero estas «no tienen los medios para rescatarlos» debido al naufragio de otro barco el domingo frente a las costas libias.
Las autoridades «intentarán probablemente desviar buques comerciales» hacia el lugar donde se está hundiendo el barco, una operación complicada ya que, según la OIM, algunos «no quieren colaborar».
Cada día la guardia costera italiana o los barcos mercantes rescatan una media de entre 500 y 1.000 personas.
Según la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), 35.000 migrantes llegaron en barco al sur de Europa desde principios de año, y 1.600 desaparecieron en la travesía.