El milagro globalizador.
El mercado lo abarca todo, incluida la salud, o mejor dicho, la imagen de «buena salud»; ahí tiene el filón de los filones… y en definitiva, lo que resulta es que cuando las apariencias se compran, la salud está vendida.
Así vamos consumiendo mentiras a tutiplén, disfrazadas de panaceas necesarias para el bienestar de las personas, cuando en realidad quien “está contento” es el lucro y la estafa, no hay más que acordarse de “iDental”…
Mucus, la inteligencia mocarra, da cuenta de ello en su sección:
DE LA PARIDA AL MÁS ALLÁ DEL PAREADO DE UN INSALUBRE MERCADO
El capitalismo ataca a la salud
si eres pobre, ve preparando tu ataúd.
El mercado versado en apariencia
vende sin ningún tipo de conciencia.
Lo de menos, la verdad y la ciencia
¡consumiendo sin razón ni consciencia!
Mucus esputa:
Hay diferencias entre comprar tersura
y por pobre, tratarte como basura.
Del uso mercantil sentimos hartura
más que nada por tanto interés y usura.
¿Y la igualdad en dignidad…? ¡¡Qué conjura!!