El periodista y fixer Said Chitour ha sido liberado a última hora del domingo 12 de noviembre (día no festivo en Argelia). Ha salido del centro penitenciario de El Harrach, tras ser condenado a 16 meses de prisión, tiempo ya purgado durante su encarcelamiento provisional a la espera de juicio. La vista pública ha sido fulgurante. Incluida la deliberación de los jueces, ha durado apenas tres horas. El fiscal pedía cinco años de cárcel.
Chitour estaba encarcelado desde el 5 de junio de 2017, cuando fue detenido en el aeropuerto de Argel al regresar de un viaje desde España. Entonces, fue acusado de espionaje y de “dañar a la seguridad nacional”. En el juicio, Said Chitour, que aparecía muy débil, ha explicado que lo único que había intercambiado con algunos diplomáticos fueron artículos publicados en la prensa. El pasado 4 de noviembre, el Tribunal Supremo argelino había rechazado una apelación del periodista contra la consideración delictiva de los hechos constatados contra él. En el juicio, la fiscalía ha reiterado la acusación de haber realizado labores “de inteligencia con potencias extranjeras y de atentado contra la seguridad y la economía del país”, susceptible de recibir una condena a cadena perpetua.
Said Chitour se ha defendido replicando que él no es otra cosa que un periodista conocido, que ha colaborado “con medios diversos como el Servicio Mundial de la BBC, France 24 o el Washington Post, entre otros”. En nuestro artículo de hace cuatro días señalábamos que colaboró también –esporádicamente- con los equipos de enviados especiales de TVE en Argelia.
Sobre su trabajo y contacto con diversas embajadas, Said Chitour ha respondido: “No eran informes, sino análisis y opiniones propias. Nada secreto o que tuviera que ver con la seguridad del país”. En un momento determinado, Chitour ha insistido en que no es otra cosa que “un periodista profesional” y se ha atrevido a preguntar:“¿Qué informaciones he dado contra la seguridad del país?” Asimismo ha reiterado que los servicios de seguridad argelinos conocían el contenido de sus intercambios.
La fijación repentina del juicio oral –que no figuraba en la agenda del Tribunal de Dar el Beida ni en noviembre, ni en diciembre- ha sido una enorme sorpresa para los abogados de Chitour. Su madre y otros familiares estaban presentes en la sala de la audiencia. Su estado de salud ha empeorado día a día en la cárcel, entre otras cosas por la aparición de varios quistes en el cerebro (de los que no se tiene constancia pública de su carácter y gravedad). También sufre vértigos y es diabético.
Antes que Said Chitour, asimismo los periodistas Abdou Semmar y Meroune Boudiab (Algérie Part), que habían sido encarcelados hacía pocos días, el 23 de octubre, fueron también liberados dos días antes tras un juicio rápido. Estos dos últimos estaban acusados de “difamación e intromisión en la vida privada” tras ser denunciados por parte de Anis Rahmani, dirigente de la cadena privada TV Ennaha, el mayor grupo mediático del país, y por el wali de Argel (prefecto) Abdelkader Zoukh a quien distintos medios han vinculado con asuntos de corrupción.
Sin embargo, Adlène Mellah, director de las publicaciones digitales Algérie Direct y Dzair Presse, también en la cárcel desde mediados de octubre, ha visto rechazada su petición de libertad provisional. Distintos medios digitales de Argelia denuncian desde hace algún tiempo “una campaña de criminalización” de la prensa electrónica del país.
Una amplia campaña internacional había pedido la liberación de Said Chitour, el caso más significativo de todos los citados. En nuestro artículo de hace pocos días, hacíamos una referencia a su trayectoria profesional y a su encarcelamiento en el contexto de la situación argelina.