Tal como insistían varias organizaciones internacionales, el gobierno turco ha decidido finalmente poner el caso del asesinato de Jamal Khashoggi en manos de instancias internacionales, aunque reconocen la dificultad de que tal paso sea aprobado en el Consejo de Seguridad donde Washington, aliada de Arabia Saudí, o Rusia, con casos similares, pueden hacer uso de su derecho a veto.
El ministro de Exteriores turco, Mevlut Çavusoglu, ha asegurado que el presidente de la república, Receb Tayyib Erdogán, ha ordenado tomar las medidas necesarias para trasladar el caso Khashoggi a las instancias internacionales. En una entrevista al canal turco El Khabar, el canciller turco ha manifestado que ya era hora de una investigación internacional del asesinato del difunto periodista.
A finales del año pasado, Turquía informó a los Estados Unidos de las conclusiones de la fiscalía general turca. Ankara ha insistido en reiteradas ocasiones que las órdenes provenían de los niveles más altos de las autoridades saudíes y que el equipo de asesinos saudí no actuó por sí sólo.
Asimismo, los turcos solicitan a los saudíes la entrega de los acusados del asesinato de Khashoggi para su comparecencia ante los tribunales turcos, una petición que se ha reiterado tras el anuncio de Riad del inicio del juicio a once acusados a principios de este mes, a cinco de los cuales se pide pena capital, un juicio que ha sido cuestionado por varios países y organizaciones.
El estancamiento del caso ante la falta de cooperación de las autoridades saudíes que han decidido llevar a cabo un juicio propio en suelo saudí, la falta de voluntad política de la administración Trump y el empuje de la sociedad civil local e internacional han terminado por convencer a las autoridades turcas de trasladar el caso a los organismos internacionales competentes.
Experta de la ONU dirigirá la investigación del caso Khashoggi
La relatora especial de la ONU Agnès Callamard ha informado de que viajará a Turquía la semana próxima para dirigir “una investigación internacional” sobre el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi en el consulado de su país en Estambul, mientras Turquía se moviliza para conseguir apoyos para esta investigación.
Callamard ha asegurado a la agencia Reuters en Ginebra que valorará las medidas tomadas por los gobiernos en su actuación sobre el asesinato de Khashoggi el 2 de octubre de 2018, en una visita al país otomano entre los días 28 de enero y 3 de febrero de 2019, así como averiguar “la naturaleza y el alcance de la responsabilidad de los Estados y los individuos en el crimen”.
La Relatora Especial sobre Ejecuciones Extrajudiciales, Sumarias o Arbitrarias ha asegurado que trasladará las conclusiones de sus pesquisas sobre el asesinato de Khashoggi al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en junio próximo.
Al mismo tiempo, la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha dicho en una entrevista a Aljazeera que solicita una investigación independiente sobre el caso Khashoggi, por ello la Comisión de los Derechos Humanos formará un comité para estudiar el caso.
En este contexto, el Parlamento Europeo ha expresado su apoyo a la creación de una comisión de investigación independiente dirigida por Naciones Unidas para investigar el asesinato del periodista saudí. El presidente de la Comisión de los Derechos Humanos del Parlamento Europeo, el italiano Antonio Panzeri, al comentar el llamamiento de Human Rights Watch para la formación de dicha comisión de investigación, ha manifestado al canal Aljazeera que el Parlamento Europeo había formulado anteriormente una petición similar para revelar las circunstancias del crimen y la determinación de las responsabilidades.
Por su parte, el ministro de Finanzas saudí, Mohamed Al-Jadaan, ha dicho que su país lamenta profundamente lo sucedido al periodista saudí Jamal Khashoggi. El Ministro agregó en una sesión del Foro Económico Mundial de Davos, en Suiza, que su país trabajará para que se haga justicia en el juicio a los asesinos de Khashoggi.