Si ha podido comprobar que sus piernas están llenas de moratones o cardenales, puede que padezca fragilidad capilar o una mala circulación sanguínea, y con la edad, se han acentuado los síntomas.
Los hematomas que son las fugas de glóbulos rojos hacia fuera del vaso sanguíneo realmente son poco visibles, pero según el organismo metaboliza la sangre la piel llegan a presentar un color verde, posteriormente amarillo o morado hasta desaparecer por completo cuando se va tornando marrón.
Cualquier traumatismo por pequeño que este sea, puede provocar que algunos capilares se rompan y si estos están cerca de la superficie de la piel llegan a ser más visibles.
Los llamados cardenales o moratones se pueden formar por tres causas normalmente; la primera por anomalías en la coagulación de la sangre; la segunda, por anomalías en las plaquetas y la tercera, por alteraciones de los vasos sanguíneos. Si usted necesita saber qué está sucediendo, debe acudir a un médico especialista en vascular para que mediante un análisis de sangre determine si tiene un déficit de plaquetas o si toma algunos fármacos anticoagulantes o antiagregantes que los posibilitan.
Si por otro lado tiene fragilidad de los vasos sanguíneos estos serán responsables de las petequías y púrpuras que podrá apreciar con o sin dolor. A medida que envejecemos la piel va perdiendo su elasticidad por la pérdida de colágeno y baja necesariamente nuestro umbral de resistencia para soportar moratones frente a las mínimas contusiones o golpes.
Las mujeres con la llegada de la menopausia, tienden a desarrollar por la pérdida de hormonas, más moretones tanto en nalgas como en muslos, así como en la parte superior de los brazos. Si padece diabetes u otras enfermedades de la sangre, tiene la piel muy pálida y ha hecho ejercicios bruscos, puede que tenga más cardenales que el resto de las personas de su entorno que tengan la misma edad.
De igual forma, si ingiere medicamentos que reducen la capacidad de coagulación de la sangre tales como aspirina, corticoides, anticonceptivos, es posible que estos predispongan a padecer moratones sin razón alguna. Algunos pacientes con una alimentación desequilibrada que acusan falta de vitamina C pueden también padecerlos así como aquellos que se exponen al sol durante varias horas seguidas.
La prueba de Rumpel-Leede determinará el número de petequias que se producen y si la fragilidad capilar que usted padece es importante o no. En cualquier caso, si tienden a tenerlas añadir a la dieta, vid roja, rusco, castaño de indias, cristalina y otras proantocianidinas, (flavonoides que contienen las semillas de la uva roja) estos podrán ayudarle así como la ingesta de Vitamina E y aloe vera para aumentar a elasticidad de la piel. Existen también pomadas en el mercado para favorecer la circulación de retorno compuestas por flavonoides que pueden ayudarle a manejar los estadios severos o los primeros días si existiera dolor.
El tabaco, el alcohol y el estrés son también causa de tener capilares rotos y de tener un aumento de la presión arterial procurada por los hábitos poco saludables de vida que pueden favorecer la aparición de cardenales y la fragilidad capilar.