Miles de activistas recorrieron Estados Unidos durante siete semanas hasta su capital, Washington, para unirse a las más de cien mujeres en huelga de hambre frente al Capitolio, que exigen a legisladores republicanos la aprobación de la reforma migratoria.
La gira nacional de la coalición ‘Fast for Families’ llegó a Washington, y con ella el final de otra etapa de presión al Congreso por la aprobación de la reforma migratoria, informa Andes.
El movimiento pro inmigrante organizó una escalada de movilizaciones, protestas, marchas y huelgas de hambre, que buscan sensibilizar a los legisladores en el Congreso con el fin de pedir la aprobación de una reforma migratoria y exigir a Obama que detenga las deportaciones.
El colectivo tiene previsto la entrega de una carta al Congreso para pedir una votación sobre la esperada promesa electoral. «Pensamos que tenemos votos en la Cámara de Representantes para pasar la reforma migratoria, pero el Partido Republicano está jugando a hacer política con nuestras vidas», opina el director de la organización comunitaria, Gustavo Andrade.
«Creo que la acción comunitaria es la única forma con la que vamos a impulsar a nuestros líderes para que pasen la reforma migratoria y debemos pasar la reforma migratoria este año porque cada día que pasa, al menos 100.000 personas están siendo separadas de la gente que quieren, de sus familiares», dijo a RT el activista Trent Lion-Lierman.