Nos comprendemos. Nos entregamos a las causas más nobles. Nos complementamos. Hemos dado con los tonos que nos imprimen magia.
Nos gozamos en armonía, con un punto de equilibrio. Nos atesoramos. Nos experimentamos con honor. Somos honestos.
Nos fundimos en una causa que nos portará donde somos pura querencia. Hemos topado con la voluntad más manifiesta.
Nos relatamos con empeño. Nos tildamos de exclusividad. Nos tornamos parte de la fiesta, que expandimos.
Superamos los catálogos. Nos glosamos con fortuna. Hemos atendido las bases para poner las suficientes alturas de miras. Arribamos donde debe ser. Ahí estamos.