Nueva York, la ciudad gótica de Batman, rascacielos y diversidad, finanzas y arte, locura y flema anglosajona. Todo confluye en sus calles. Después del terrible 9/11 hay más policías y el suceso de las Torres Gemelas no se olvida, especialmente para los que vivimos aquellos momentos; pero el gran espíritu de Nueva York se impone. ¡Nueva York es maravillosa!
Esta vez decidí recorrerla gozando sus anchas avenidas, el reflejo de los edificios sobre las ventanas gigantes de vidrio, el viento que llega del rio Hudson y las gruas que siguen construyen rascacielos, en la ciudad que no duerme.
El MOMA: Retrospectiva de Charles White
Visite el MOMA, uno de los grandes centros artísticos de América donde siempre hay exposiciones interesantes. Y quiero hablar de ellas, comenzaré con la dedicada a Charles White.
Charles White es un artista afroamericano nacido en 1918 en Chicago y fallecido en 1979, en California. En 2018 era centenario de su nacimiento y esta exposición es la mayor retrospectiva ofrecida hasta ahora; reúne dibujos, grabados, óleos, documentos y fotografías.
White pertenece al Movimiento Chicago Black Renaissance, su vocación artística comenzó temprano y su madre, viendo su inclinación a pintar, a los siete años le compró lápices y óleos.
Charles estudió danza, teatro y música, ingresó en el famoso Art Institute of Chicago donde se relacionó con los grandes maestros del arte.
A raíz del nuevo casamiento de su madre pasa temporadas en Mississippi, con sus tios y conoce el folklore Americano y el concepto de la negritud. Observa los temas de su comunidad negra y completa, con esfuerzo, sus estudios de arte. Comienza su carrera participando en diversas exhibiciones. Su más celebre trabajo es el mural “La contribución del Negro a la Democracia Americana”.
Después de alistarse como soldado en la Segunda Guerra Mundial (que le dejó la secuela de la tuberculosis), trabaja como profesor en Nueva Orleans, luego en Nueva York.
Son años de febril producción, expone en Nueva York y luego viaja a México. Por problemas de salud, se instala en California. Sus trabajos ya son conocidos como también su compromiso con los temas de la comunidad afro.
Su obra comienza a formar parte de las colecciones de arte universitarias, y figura en los catálgos del Museo Whitney, del Smithsonian American Art Museum, y otros.
El reconocimiento de su labor artística y social llega en los 80, y actualmente es uno de los artistas más destacados de su época.
Visitar su muestra fue una revelación por su temática tan comprometida y sus planteamientos humanísticos, igualmente, por su técnica y pericia en el dibujo, el grabado y óleos. A través de estas cien obras se aprecia el alcance de este artista, fiel a su problemática y audaz en sus imágenes y su estilo.
Arquitectura en Yugoslavía: 1948-1980
La sección de Arquitectura del MOMA, convoca una interesante exhibición sobre la arquitectura en Yugoslavia desde 1948 a 1980.
Arquitectos, diseñadores y artistas jugaron un rol importante en la imagineria del estado Socialista, además de la utopia del futuro comunista. De alguna manera, el Socialismo en Yugoeslavia tuvo connotaciones diferentes a otros países que entraron bajo la cortina de hierro.
Este interesante análisis de la evolución y el enfoque socialista en la arquitectura se presenta con fotos, maquetas, dibujos y excelente documentación.
La destrucción durante la Segunda Guerra Mundial determina una nueva urbanización ante la reconstrucción y los conceptos “moderninad”. A la idea de urbanización y modernidad, se suma el concepto comunista, en el caso de la Antigua Yugoeslavia; y el aspecto de Turismo, en Croacia, con una infraestructura que sobrevive en la actualidad. En esta exposición se destaca, a su vez, la creatividad de arquitectos como Bogdan Bogdanovic, Svetlana Radevic, Edvard Ravnikar, Vjenceslav Richter y Milica Steric.
Para el historiador Martino Stierle la arquitectura de la Yugoslavia Socialista fue como un laboratorio de globalización durante la Guerra fria, y al apreciar el conjunto, podemos pensar también, en una búsqueda de la identidad nacional.
Bruce Nauman
Bruce Nauman, nacido en 1941, es un artista americano de tendencia conceptual, con una vasta obra donde ha explorado diversas técnicas y materiales: esculturas, videos, fotografía, gráfica, neón, objetos, el propio cuerpo, performance, creando expectativas inquietantes donde la diversificación de la multimedia se une a la estética de una idea como punto de partida para la creación.
La curadora Kathy Halbreich valora la obra del artista considerando que su trabajo está en continua exploración entre tensiones plásticas y psicológicas.
Nauman tiene formación científica puesto que estudió matemáticas, física y luego se volcó hacia el arte, impulsado por las ideas del filósofo Ludwig Wittgenstein. Su carrera lleva cincuenta años ininterrumpidos de exposiciones en Estados Unidos y Europa y con obra en colecciones privadas y museos internacionales.
Es dificil penetrar su mundo visual sin cierta incomodidad. Recorriendo esta retrospectiva de 165 trabajos, se pueden apreciar hallazgos y búsquedas, conflictos y propuestas, nunca la calma.
Nauman es el mentor de la duda y la tensión. Su obra interactúa con el espacio, el tiempo, el movimiento y un lenguaje plástico inquietante, incluso como precursor del body art, no se detuvo y siguió remontando un camino solitario y cuestionador.
Aunque adoptó las tecnologías para sus percepciones visuales, el tema humano no abandona lo estético. La muestra nos presenta sus trabajos de los 60, 70, 80 y 90, en un detallado recorrido y vemos como en sus últimas obras, la dialéctica entre lo visible e invisible toma cuerpo plástico y filosófico. ¿Acaso Nauman esta hablandonos de la muerte?
En todo caso, Nauman no nos deja tranquilos, en toda su obra hay una fuerza inquisitiva y provocadora.
