El fotoperiodista egipcio Mahmoud Abu Zeid, conocido como Shawkan, sigue en prisión más de dos meses después de conocerse su sentencia. Como se recordará, fue sentenciado el pasado 8 de septiembre a cinco años de prisión, con lo que sobrepasa este tiempo desde que fue detenido en agosto de 2013, y a pesar de ello continúa en la prisión de Tora con graves problemas de salud, hepatitis C, anemia y depresión.
El Instituto de Prensa Internacional (IPI), ha enviado un escrito al presidente egipcio Abdelfatah Al Sisi solicitando su puesta inmediata en libertad, ya que no hay ninguna explicación oficial de por qué sigue retenido en la cárcel. También, el pasado 11 de octubre, la Red Árabe por la Información de Derechos Humanos (Anhri, siglas en inglés), instó a las autoridades egipcias a liberarlo.
Shawkan, de 31 años, debía ser liberado «en unos días» después de conocerse la sentencia, según anunció su abogado Karim Abdelrady, pero han pasado más de dos meses desde entonces. Ahora considera que son problemas debidos a la lentitud de la administración y la «imprecisión del veredicto» al tratarse de una macrocausa.
La sentencia se produjo después de más de dos años y medio de interminables sesiones judiciales. No obstante, Shawkan, una vez puesto en libertad, deberá presentarse todos los días en comisaría, y no podrá salir del país durante un periodo de cinco años en lo que se considera una libertad vigilada.
La sentencia, dentro de lo esperado, fue benévola, teniendo en cuenta las 75 penas de muerte dictadas en la macrocausa contra 739 personas por las protestas masivas del 14 de agosto de 2013. Se le solicitaba la pena de muerte según la petición de la fiscalía, y al final fue condenado a cinco años, que ya ha cumplido más que de sobra.
Se enfrentaba a nueve cargos, además de la posible pena de muerte, cadena perpetua por acusaciones que incluían “el asesinato, el intento de asesinato, la pertenencia a un grupo ilegalizado”, -en alusión a los Hermanos Musulmanes- así como “la participación en una manifestación ilegal y la posesión de armas”.
Mahmoud Abu Zeid fue detenido el 14 de agosto de 2013 mientras fotografiaba la matanza de la plaza de Rabaa al Adawiya, en la que se encontraban miles de seguidores del presidente Mohamed Mursi, derrocado previamente por los militares el 3 de julio de 2013.
El fotógrafo egipcio ha trabajado para el diario egipcio Akhbar el Youm, colaborando con las agencias Corbis y Demotix de Londres y sus fotografías habían aparecido en medios como The Sun, Time Magazine, Bild o Die Zeit.
La fuerte presión internacional, tanto de distintos colectivos como de numerosas personas a título individual, en Egipto y en el resto del mundo, no ha cejado en ningún momento desde que entró en prisión y se le ha considerarlo un icono de la libertad de expresión.
El pasado mes de mayo, Abu Zeid fue galardonado con el premio de libertad de prensa de la Unesco. Shawkan ya había recibido otros premios durante su largo cautiverio: la sección de fotógrafos del Sindicato de Periodistas de Egipto le otorgó el premio anual 2017 y el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, siglas en inglés) le concedió el premio internacional por la libertad de prensa en 2016.
Reporteros Sin Fronteras (RSF) y Amnistía Internacional (AI) pidieron su liberación durante todos los años que permaneció preso. Shawkan está apadrinado por diferentes periodistas españoles.