El gobierno de Pedro Sánchez ha aprobado el real decreto por el que se devuelve la universalidad al Sistema Nacional de Salud (SNS) en el que incluirán de nuevo el derecho a recibir asistencia sanitaria a los inmigrantes en situación administrativa irregular así como a las personas nacionalizadas en España, a los extranjeros residentes y a los pensionistas que residen en otros países así como a los trabajadores transfronterizos.
De esta forma, la atención sanitaria en condiciones de universalidad y por tanto, de equidad, será un derecho de toda persona. El real decreto deroga el anterior aprobado por el partido popular en 2012 que excluía a los citados colectivos.
«La titularidad del derecho a la asistencia en el Sistema Nacional de Salud se basa en la condición de ciudadanía y, por tanto, de desliga de la condición de asegurado», recalcó la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, Carmen Montón, «una sociedad justa no deja a nadie atrás».
La atención permitirá un mejor control de las enfermedades y de la salud pública ya que al atender urgencias se evitarán gastos adicionales por hospitalizaciones porque no existirán descompensaciones en enfermedades. También está previsto evitar el llamado turismo sanitario dado que se han establecido criterios que eviten el uso inapropiado del derecho a la asistencia sanitaria. La factura no correrá a cargo de los fondos públicos siempre que exista un tercero, obligado al pago o que se pueda exportar el derecho de cobertura desde su país de origen. Serán pues la comunidades autónomas, las que fijarán el procedimiento para la solicitud y expedición del documento que acredite a las personas extranjeras a recibir la prestación asistencial.
La situación que puso en marcha el gobierno de Rajoy con Ana Mato como ministra, produjo a todas luces una situación de inequidad y de desigualdad en las comunidades autónomas que fueron las que asumieron la prestación de la asistencia sanitaria pero sin ninguna seguridad jurídica ni para las administraciones ni para los profesionales sanitarios.
Con esta nueva medida de asistencia normalizada en atención primaria se controlarán mejor las enfermedades y se podrán atender a las demandas de organismos europeos e internacionales así como a otras peticiones científicas y movimientos sociales. La mejora de la salud individual de las personas permitirá volver a decir que en España existe una atención universal sanitaria.
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