No es nada absolutamente novedoso en sentido estricto, pero “H0us3” forma parte de la última ola de producciones de terror que ya empieza a consolidarse: adiós a las viejas mansiones convertidas en residencias de la tercera edad para fantasmas de antepasados familiares y testigos de horrendos crímenes, bienvenido el terror digital, el que asusta desde la pantalla de las etéreas herramientas de Internet, el que cuenta fábulas de delincuentes remotos y crímenes de nueva factura cometidos desde el anonimato de un teléfono, una tablet o un pc, que puede estar en la puerta de al lado o en las antípodas.
Producida y dirigida por Manolo Munguía, quien se estrena en el largometraje, “H0us3” está protagonizada por Víctor Gómez, Anna Bertrán, Roc Esquius, Bernat Mestre, Cristina Raya, Miriam Tortosa, Rubén Serrano, Mariona Tena y Diana Roig.
Será difícil que surja un Marlowe para este tipo de delitos que se resolverán también desde el anonimato de un despacho policial, pero ese policía tendrá que ser además ingeniero en telecomunicaciones e informática, como lo es el director de esta película.
“Hous3” va de un grupo de antiguos compañeros informáticos de la universidad, todos listísimos, que quedan para verse después de varios años. Acuden con sus parejas, también muy listas, a una casona en la montaña (creo recordar que de los Picos de Europa).
Durante la cena, uno de ellos presume de haber accedido a un archivo secreto de Julian Assange, el fundador de Wikileaks, y haber encontrado en él un aplicación que pone los pelos como escarpias. Los amigos se reparten entre los que sienten curiosidad y los asustados. Al intentar modificar la aplicación empiezan a sucederse “conflictos con consecuencias inesperadas”.
Película coral que, en mi opinión, solo van a disfrutar un puñado de frikis fanáticos de la ‘cosa’ informática, no solo porque el interés de los protagonistas en el maldito archivo no lo transmiten de ninguna manera al espectador sino, fundamentalmente, porque el lenguaje de estos treintañeros está lleno de códigos totalmente desconocidos para el profano que acaba desentendiéndose de las caras de terror que ve en la pantalla porque no consigue imaginarse que algo tan inmaterial pueda asustar tanto.
Es cierto que ante los avances de la tecnología informática, en Internet para que resulte más fácil, todos estamos con el culo al aire; que cualquier movimiento que hagamos –desde mandar whasaps hasta buscar una nevera de oferta- deja una huella con todos nuestros datos, preferencias, estilo de vida… y que todo eso –aunque la película no toca este aspecto- les sirve a todos los vendedores de todo para hacernos llegar ofertas, que van desde los adivinos del futuro hasta productos destinados a alargar el pene y, lo más importante, para hacerse de oro vendiéndolos.
Dejando este paréntesis aparte, la película “H0us3” –el título es una contraseña- nos recuerda que “somos tremendamente vulnerables a las nuevas tecnologías que –lo dice el director Munguía- crecen mucho más deprisa que la seguridad que aplicamos sobre ellas”.
También nos explica que los dos cabecillas del grupo, Rafa y David, “encarnan las dos grandes corrientes que existen en el mundo de la informática: los que piensan que la inteligencia artificial acabará con la humanidad (y en el planeta solo quedarán robots), y los que creen que las nuevas tecnologías podrán ayudarnos”.
En cualquiera de los casos, lo que vemos en la pantalla nos va a llevar a reflexionar sobre cuestiones tan viejas como el mundo, como la historia.