Jolgorio institucional a cuenta del dinero público.
Las cuentas en España vienen a ser la panacea de un casino en el que apuestan con ventaja bancos y organismos, ya que no se juegan su dinero y siempre ganan, poniendo todos los medios del poder a su alcance para que así sea, saqueándolo de aquí, llevándolo allá… ¡Hagan juego…!
Así Mucus, inteligencia natural de un moco, nos advierte de que este “$i$t€ma de cuentas” protege firmemente a los capitalistos “Lista Falciani” y demás zarandajas de ingenierías financieras, y si no que se lo pregunten a preferentistas, desahuciad@s de sus vidas, a personas enfermas hacinadas en los pasillos de urgencias de hospitales, enferm@s de hepatitis C, a personas en paro sin ningún tipo de prestación, a quienes trabajan en precario, a todas esas gentes que han tenido que emigrar, a estudiantes universitari@s que aparcan sus estudios, a la enseñanza pública…
Al parecer sigue habiendo chorizos sueltos, y en los asuntos que les atañen del “¡hagan juego señores!” la justicia se encarga de marear la perdiz, para que vayan derechitos a poner al día sus cuentas paradisíacas de allá y más allá, además de poder seguir ejerciendo sus derechos al juego, mientras seguimos transparentes del todo y amordazad@s por si alguien tiene la ocurrencia de protestar.
Mucus, inteligencia natural de un moco, vislumbra que para los pudientes millonarios eso de tributar es un lujo que no se pueden permitir. Que les ha costado mucho hacerse expertos en chorizar, y que eso de entregar dinero al Estado para las atenciones públicas no va con ellos, ¡¿a ver qué va a ser esto?! A su vez necesitan cómplices a quienes permiten ciertos lujos, pero «el público», el dinero, la Tierra y lo que vive en ella tienen que estar a su servicio porque les pertenecen ¡…no va más!
Así es que, dadas estas circunstancias quien se atreva a tributar dinero en España corre riesgos… El señor Montoro, ministro de Hacienda y Administraciones, hoy PPúblicas mayoritariamente, lo sabe y los de Podemos también.